Al la c¨¢rcel por orinar en la calle

El conflicto estrella que se pod¨ªa prever desde el principio de los Juegos sucedi¨® la madrugada del mi¨¦rcoles al jueves a 50 metros de la Villa Ol¨ªmpica. Dos esgrimistas espa?oles, el subcampe¨®n del mundo de florete, Jos¨¦ Francisco Guerra, y ?scar Fern¨¢ndez, del equipo de sable, fueron detenidos y encarcelados durante cuatro horas y media, porque el primero estaba orinando contra una valla.Hacer aguas en la calle es un delito federal en esta ciudad y se ha vuelto a confirmar que la inflexibilidad de una organizaci¨®n, incapaz de reconducir sus propios defectos, se traslada de forma inmisericorde hacia los protagonistas extranjeros en cuanto cometen un m¨ªnimo error. El problema del idioma -ni Guerra ni Fern¨¢ndez hablan ingl¨¦s-, tambi¨¦n influy¨®, pero no encontraron ninguna facilidad hasta que el juez los puso en libertad sin cargos y lleg¨® a pedirles disculpas cuatro horas y media despu¨¦s.

Si grave fue la actuaci¨®n desproporcionada de un polic¨ªa que est¨¢ para vigilar la seguridad de los atletas y se convierte en un remedo del mejor Clint Eastwood, mucho m¨¢s fue la versi¨®n interesada proporcionada por el comit¨¦ organizador y la propia polic¨ªa a la agencia Reuter, en la que se acusaba a los dos tiradores de ir borrachos y de exhibicionismo ante mujeres. Tal versi¨®n fue ya deso¨ªda por el mismo juez ante el que fueron conducidos.

Jos¨¦ Mar¨ªa Echevarr¨ªa, jefe de la misi¨®n espa?ola y el dirigente que estuvo presente con Guerra y Fern¨¢ndez para la resoluci¨®n del incidente, anunci¨® que se presentar¨¢ una protesta oficial al Comit¨¦ Organizador por lo sucedido y por la versi¨®n que trata de volver contra los deportistas toda la responsabilidad. Tanto ¨¦l como los esgrimistas negaron ir borrachos ("no bebemos nunca", dijo Fern¨¢ndez) y menos a¨²n el exhibicionismo salvo el acto natural para poder orinar.

Los dos deportistas iban con la acreditaci¨®n correspondiente e incluso Fern¨¢ndez con la ropa deportiva. Ven¨ªan de la cena de despedida que daba el presidente de la Federaci¨®n Espa?ola, Juan Jos¨¦ Moreno, a todo el equipo al t¨¦rmino de las competiciones. Se bajaron del taxi, que no pod¨ªa entrar en la Villa y ellos dos, al entrarle a Guerra ganas de orinar, se retrasaron de otro compa?ero y del m¨¦dico, que posteriormente les vio c¨®mo eran introducidos, esposados, en el coche policial. El agente, muy agresivo, trat¨® especialmente mal a Guerra, coloc¨¢ndole cara a la pared, pero espos¨® tambi¨¦n a Fern¨¢ndez, que ni siquiera hab¨ªa orinado. Ninguno opuso resistencia.

El implacable sistema que falla en tantas otras cosas se puso en marcha, en cambio, de forma rapid¨ªsima en este caso ante el celo profesional del polic¨ªa y los dos esgrimistas fue ron trasladados primeramente a la comisar¨ªa creada para los problemas de la Villa Ol¨ªmpica. All¨ª, coment¨® Guerra, "me quisieron hacer sentar en una silla mojada, pero me negu¨¦ hasta que la secaran gracias a una puertorriquena que hizo de int¨¦rprete".

Despu¨¦s, los llevaron a la c¨¢rcel del condado donde tras hacerles las fotos de rigor, permanecieron en una celda, y siempre esposados, hasta que fueron puestos a disposici¨®n del juez. ?ste corrigi¨® la denuncia, la considero conducta desordenada, seg¨²n Echevarr¨ªa, y les dej¨® irse pidiendo incluso disculpas por las molestias causadas.

Seg¨²n la delegaci¨®n espa?ola no se trata de un problema de indisciplina, porque adem¨¢s ambos ten¨ªan ya libertad para salir al haber terminado en los Juegos.