Una de Dios
Hablamos mucho de las presidenciales de Estados Unidos, quiz¨¢ m¨¢s que los norteamericanos, porque en el fondo sabemos que son nuestras elecciones y ni siquiera podemos figurar como abstencionistas. La disidencia tiene el aire de una queja ir¨®nica desde un inmenso Tex-Mex. Todos hubi¨¦ramos preferido la transmisi¨®n en directo del show de Bob Dole en vez de Sonrisas de Espa?a. Sucede como con el dinero. Cuando tienes un d¨®lar en la mano, te dices: "?Co?o, ¨¦sta es pasta de verdad!". Un buen dise?o. Y con esa leyenda que le da peso y trascendencia. In God we trust. El ¨²nico dinero del mundo que invoca a Dios.Es frecuente que los pol¨ªticos norteamericanos invoquen tambi¨¦n a Dios, sea para ir a la Luna o para inaugurar un alcantarillado. Bob Dole lo ha puesto al frente de su divisa electoral: "Dios, familia, honor, deber, patria". Estilo Cid Campeador, m¨¢s conocido entre nosotros como Charlton Heston. Un buen programa, algo desmerecido por la letra peque?a. Admito que Dios puede ver con buenos ojos una rebaja en los impuestos, pero no lo imagino partidario de la "tolerancia cero" en cuesti¨®n de inmigraci¨®n ni tampoco indignado, como lo est¨¢ Dole, con la pel¨ªcula Striptease, ?Qu¨¦ puede tener Dios contra la belleza desnuda de Demi Moore?
Leo la divisa de Dole en un gran titular de peri¨®dico, a bordo de un avi¨®n. Me r¨ªo. El vecino de vuelo me censura con la mirada. ?Acaso tengo yo algo contra Dios y todo eso? No puedo explicarle el porqu¨¦ de la risa. Es un fen¨®meno paranormal. La voz del pintor Pati?o, fallecido hace 10 a?os. En una ocasi¨®n interrumpi¨® temerariamente un recital de poes¨ªa m¨ªstico-falangista al grito de ?una de calamares! Por eso me r¨ªo. Leo la divisa de Dole y el trasgo iconoclasta me susurra al o¨ªdo: "Dios, familia, honor, deber, patria... ?y una de calarnares!".
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