La mec¨¢nica traiciona de nuevo a Sainz en Finlandia
El piloto espa?ol se retrasa respecto a Kankkunen y Makinen
Carlos Sainz es el pupas de 1996. Desde que viaja en un Ford, la suerte le ha dado la espalda. En Finlandia, en el Rally de los 1.000 Lagos, vivi¨® ayer la ¨²ltima demostraci¨®n. Una aver¨ªa detr¨¢s de otra, un problemilla aqu¨ª y otro all¨¢, y la posibilidad de ¨¦xito del piloto espa?ol se fue enterrando. Por culpa del turbo, despu¨¦s por un amortiguador, y hasta por los limpiaparabrisas. Ya en la primera etapa del rally, Sainz comprob¨® impotente c¨®mo el coche arruinaba su esperanza. Mientras, los pilotos locales Juha Kankkunen (Toyota) y Tommi Makinen (Mitsubishi) se disputaron la victoria.Sainz acab¨® anoche octavo, a tres minutos de Kankkunen, el mejor piloto del d¨ªa, y se dej¨® m¨¢s de dos minutos respecto a Makinen, su principal rival en el Mundial. El bicampe¨®n espa?ol termin¨® la etapa muy cabreado. "Se te quitan las ganas", dijo. No se cre¨ªa tanto infortunio.
La desventura de Sainz en su retorno al 1.000 Lagos comenz¨® enseguida. A los 13 kil¨®metros del primer tramo cronometrado not¨® que a su coche le faltaba potencia y, a medio gas, sin que el motor pasara de 3.000 revoluciones, cubri¨® los casi 10 kil¨®metros que le quedaban hasta el final de la prueba especial. El peaje por esta aver¨ªa, motivada por un fallo en el turbo -se solt¨® el manguito de descarga de aire-, fue la p¨¦rdida de un minuto y medio respecto a los mejores tiempos.
Fue un mazazo inesperado, prematuro, pero Sainz logr¨® sobreponerse y empez¨® a remontar. "Es dif¨ªcil, y m¨¢s en un rally tan igualado como ¨¦ste, pero vamos a intentarlo", coment¨®. Segundo a segundo, empez¨® a limar diferencias sobre sus rivales, excepto sobre Kankkunen, que gan¨® en la mayor¨ªa de los tramos y se destac¨® progresivamente. El veterano tetracampe¨®n corr¨ªa junto a su casa y nunca pareci¨® que su Toyota ya no est¨¦ siendo desarrollado, despu¨¦s de la sanci¨®n que la marca sufri¨® al final de 1995.
Pero las desgracias de Sainz no hab¨ªan terminado, Cuando ya consegu¨ªa enderezar su clasificaci¨®n y recortaba tiempo a la mayor¨ªa de los que le preced¨ªan -fue segundo tras Kankkunen en varias pruebas-, otro incidente mec¨¢nico fren¨® de golpe su reacci¨®n. Sucedi¨® en el s¨¦ptimo tramo, el m¨¢s largo del d¨ªa (32 kil¨®metros), y esta vez se parti¨® un latiguillo en el amortiguador delantero izquierdo.
La aver¨ªa no fue extremadamente grave y la p¨¦rdida, en tiempo, result¨® peque?a (medio minuto). Pero cort¨® las alas a Sainz y le dej¨® con la moral por los suelos. "Es incre¨ªble", exclam¨® desesperado el bicampe¨®n. "En el tramo m¨¢s exigente nos ocurre esto". Su incredulidad ante tanta desgracia la acentu¨® el ¨²ltimo problema, el m¨¢s tonto del d¨ªa: tambi¨¦n en esa larga especial se accionaron inesperadamente los limpiaparabrisas y el chorro de agua. Y el piloto no logr¨® que se pararan.
Clasificaci¨®n
Primera etapa: 1. Kankkunen (Toyota), 1h 39m 18s. 2. Gronholm (Toyota), a 42s. 3. Makinen (Mitsubishi), a 1 m 19s. 8. Sainz (Ford), a 3m. Hoy, segunda etapa: 12 pruebas especiales (172 kil¨®metros).
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