Falta de peso pol¨ªtico

Abel Matutes Juan tuvo la oferta, a finales de los ochenta, de sustituir a Manuel Fraga a la cabeza del Partido Popular, pero hoy en d¨ªa es un ministro carente de peso pol¨ªtico sin un equipo de Gobierno que, mayoritariamente, pertenece a una generaci¨®n m¨¢s joven. De ah¨ª sus dificultades para sacar delante los nombramientos de embajadores y altos cargos y el secretismo sin precedentes que los rodea hasta que llegan al Consejo de Ministros por temor a que el candidato del ministro sea derrotado frente a otro del partido o del presidente del Gobierno, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar.La debilidad pol¨ªtica de Matutes se acrecienta adem¨¢s por tres razones. Excepto un amigo, los colaboradores que ha elegido son, curiosamente, casi desconocidos que no forman un equipo cohesionado en torno su persona que act¨²e como correa del transmisi¨®n con el resto del ministerio y de la Administraci¨®n.

Trabaja adem¨¢s poco a juzgar por los numerosos d¨ªas de vacaciones que se ha tomado, en Ibiza, en comparaci¨®n con los dem¨¢s miembros del gobierno. Algunos de ellos est¨¢n sorprendidos de que su colega no haya aprovechado sus d¨ªas libres de finales de julio o la ¨²ltima semana de agosto para emprender viajes y dar a conocer en Latinoam¨¦rica, en el mundo ¨¢rabe o en Europa del Este el rostro del nuevo Ejecutivo espa?ol.

Carece, por ¨²ltimo, Matutes de ambici¨®n y no duda en afirmar que este cargo es su ¨²ltima singladura po¨ªtica" porque despu¨¦s aspira a dedicarse de lleno a su familia y a sus negocios, que por ahora lleva m¨¢s directamente su hermano Antonio.

Aznar le pidi¨®, hace ya tres a?os, que fuese su ministro de Exteriores porque probablemente no contaba, entre sus lugartenientes, con nadie con un curr¨ªculo y una experiencia internacional comparable a la que Matutes adquiri¨® durante ocho a?os en las diversas comisar¨ªas que ocup¨® en Bruselas. Una vez nombrado "aprovecha su agenda de contactos pero le tiene maniatado", comenta un diplom¨¢tico.