Varios expertos afirman que 700.000 'vacas locas' llegaron al consumo humano en 10 a?os
Otro informe indica que la epidemia desaparecer¨¢ el 2001 sin sacrificar m¨¢s reses
Un informe cient¨ªfico independiente publicado ayer en la revista brit¨¢nica Nature ha resucitado la pol¨¦mica sobre la envergadura del problema sanitario planteado por la epidemia de las vacas locas y las medidas adoptadas por el Gobierno brit¨¢nico para atajarla. Seg¨²n dicho trabajo, un total de 726.000 reses Infectadas han sido sacrificadas para el consumo humano entre 1986 -cuando se detect¨® la epidemia- y 1995. Al mismo tiempo, los cient¨ªficos sostienen que la epidemia estar¨¢ vencida en el a?o 2001 sin necesidad de sacrificar las 140.000 reses que planea el Gobierno.
El Gobierno brit¨¢nico prefiri¨® ayer centrarse en el segundo y m¨¢s positivo aspecto del informe, el que afirma que la epidemia de vacas locas habr¨¢ terminado en 50 a?os sin necesidad de grandes medidas. Angela Browning, responsable de Agricultura, respondi¨® a las reclamaciones de los ganaderos asegurando que el informe ser¨¢ estudiado a fondo antes de iniciar el sacrificio masivo de reses menores de 30 meses de edad.Sin embargo, algunos peri¨®dicos brit¨¢nicos se hac¨ªan ayer especial eco del "perturbador", en palabras de una portavoz de la Asociaci¨®n de Consumidores brit¨¢nica, c¨¢lculo de los cient¨ªficos. Un equipo internacional de expertos en sida que dedic¨® sus esfuerzos a investigar la Encefalopat¨ªa Bovina Espong¨ªforme (al reconocer el Gobierno brit¨¢nico en marzo la aparente relaci¨®n entre 10 casos de la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob y la enfermedad de las vacas locas) han concluido que la cifra real de reses que fueron sacrificadas y consumidas pese a estar infectadas fue de 446.000, entre 1986 y 1989 cuando el Gobierno tom¨® las primeras medidas para frenar la epidemia. A partir de esa fecha -cuando se orden¨® la destrucci¨®n de los sesos, espina dorsal y dem¨¢s despojos-, la cifra se redujo a 280.000 animales hasta el a?o pasado.
Las razones que han permitido que carne de animales infectados saltara todas las barreras sanitarias a lo largo de los 10 a?os de existencia de la epidemia de EBE hay que buscarlas en el largo periodo de incubaci¨®n de la enfermedad: cinco a?os. Normalmente en el Reino Unido las reses se sacrifican a los tres a?os de edad, lo cual ha permitido. al equipo dirigido por el profesor Roy Anderson, inferir que muchos animales enfermos que a¨²n no presentaban s¨ªntomas han sido dados por sanos. Un dato valorado por los cient¨ªficos a la hora de elaborar la curva de la infecci¨®n ha sido el anuncio, este mes, de que la enfermedad puede transmitirse de las vacas a los terneros e incluso a los corderos.
La reacci¨®n en Bruselas
Las mismas investigaciones y c¨¢lculos han llevado al equipo a una conclusi¨®n optimista: la epidemia estar¨¢ terminada para el a?o 2001. Seg¨²n Christl Donelly, uno de los miembros del equipo que trabaja en la universidad de Oxford, "ya se han detectado el 95% de lo s casos hasta el momento y de aqu¨ª al a?o 2001 el n¨²mero de nuevos casos ser¨¢ ¨ªnsignificante".
Los cient¨ªficos consideran que la evoluci¨®n de la epidemia provocada al alimentar con despojos de mam¨ªferos -sobre todo ovejas- a las reses, no hace necesario el sacrificio de 140.000 vacas previsto por el Gobierno. Ayer, tales afirmaciones con sello cient¨ªfico causaron una nueva erupci¨®n de cr¨ªticas a la pol¨ªtica de sacrificio de reses acordada por el Gobierno brit¨¢nico en el marco de la cumbre de Florencia, en junio pasado, para lograr el levantamiento de la prohibici¨®n que pesa en estos momentos sobre las exportaciones de bovino brit¨¢nico. "Si los cient¨ªficos en toda Europa aceptan esta evidencia podr¨ªamos lograr una reducci¨®n en el n¨²mero de reses a sacrificar", dijo ayer el presidente de la Asociaci¨®n de Ganaderos, David Na¨ªsh, quien, no obstante, condicion¨® la nueva pol¨ªtica a adoptar al visto bueno de los socios europeos. Por su parte, el Gobierno, que hab¨ªa acogido con buenas palabras el informe cient¨ªfico, se enfrent¨® ayer con nuevas presiones para revisar toda su estrategia con vistas a lograr el fin del embargo de vacuno brit¨¢nico.
No es probable, sin embargo, que Bruselas acepte ninguna relajaci¨®n de las medidas acordadas. M¨¢s bien todo lo contrario. [Ayer mismo, la agencia Reuter informaba de un nuevo caso de muerte de un granjero por la enfermedad humana de las vacas locas. El hombre muri¨® el pasado a?o y su caso evidencia la posibilidad de contagio por contacto].
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