La equitaci¨®n, un instrumento ¨²til para tratar discapacidades

Desde que en los a?os sesenta los n¨®rdicos encontraran al caballo nuevas propiedades terap¨¦uticas, la hipoterapia y la terapia ecuestre se utilizan en muchos pa¨ªses para tratar patolog¨ªas tanto a nivel f¨ªsico como psicol¨®gico, sensorial, relacional, educativo pedag¨®gic¨® y social.Para Edouard Tissot, terapeuta en un colegio de deficientes mentales en Ginebra, una de las ventajas que ofrece este tipo de terapia es la relaci¨®n afectiva que se establece entre el animal y el paciente. Al caballo se le puede hablar, tocar o sentir. Este tipo de comunicaci¨®n es particularmente ¨²til para las personas con problemas relacionales.

En las discapacidades f¨ªsicas, en contacto del jinete con el lomo del animal y el movimiento ayuda a descontraer una serie de m¨²sculos, que de otra manera ser¨ªa dif¨ªcil hacer trabajar. Pero quiz¨¢ una de las ventajas m¨¢s notables es de tipo psicol¨®gico. Y es que el jinete, acostumbrado a sentirse inferior desde su silla de ruedas 0 desde su peque?o tama?o, desde lo alto del caballo la relaci¨®n cambia y mira al mundo desde arriba.

La Asociaci¨®n para la Terapia Ecuestre Suiza (ATES) diferencia tres categor¨ªas. La original. es la hipoterapia que. en el sentido estricto del t¨¦rmino significa "curar por el caballo", y que no es otra cosa que la utilizaci¨®n de los movimientos producidos por el animal en el marco de la reeducaci¨®n terap¨¦utica.

Otro tipo es la reeducaci¨®n por la equitaci¨®n, que se sirve de las bases f¨ªsicas de la hipoterapia. El paciente debe ejercer una influencia en el caballo y darle ¨®rdenes que tienen que cumplirse. Y, por ¨²ltimo, el deporte y las actividades ecuestres adaptadas, que utilizan todas las ventajas de la equitaci¨®n tradicional y cuya, aplicaci¨®n se ajusta a la s necesidades espec¨ªficas de las personas con problemas particulares.

Orientaci¨®n

"El caballo es un auxiliar notable en momentos de aprensi¨®n o de angustia", se?ala el especialista Huber Lallery, "cuando un jinete tiene miedo de caerse, como suele ser el caso de los hemipl¨¦jicos, si se. le da la mano para tranquilizarle se deja caer inmediatamente o tendr¨¢ todav¨ªa m¨¢s miedo. El menor que no se siente c¨®modo en su caballo pide una ayuda, pero no corporal, sino psicol¨®gica",Y recuerda el caso de un ni?o de 10 a?os con una estructura psic¨®tica que sin saber leer ni escribir- e incapaz de circular solo porque carec¨ªa de cualquier- sentido de la orientaci¨®n, despu¨¦s de un a?o de terapia psicomotriz, ecuestre -unas 40 sesiones de entre 20 y 25 horas- logr¨® recuperar dicho sentido de la orientaci¨®n y tras cinco a?os de cuidados era capaz de hacer solo los recados, ya fuera andando o montando en bicicleta, sin la presencia de su madre.