Peligra el premio Nobel de Literatura por la crisis de la Academia sueca
Knut Ahnlund, miembro de la Academia sueca desde hace 26 a?os y uno de los integrantes del comit¨¦ encargado de la selecci¨®n final para la elecci¨®n del Premio Nobel de Literatura, anunci¨® anteayer que se retira de las tareas que cumpl¨ªa en dicho organismo. El acad¨¦mico hab¨ªa dejado de concurrir a las sesiones de la corporacl¨®n el pasado enero, aunque hasta el pasado mi¨¦rcoles no hab¨ªa hecho p¨²blica su decisi¨®n.Una consecuencia imprevista de la decisi¨®n de Ahnlund es que el organismo, de 18 miembros vitalicios, queda ahora reducido a 14, y el n¨²mero necesario m¨ªnimo que puede otorgar el Premio Nobel es de 12. Cualquier contratiempo que pudiera disminuir ese n¨²mero entra?a el riesgo de que el premio no se adjudicara este a?o. El secretario permanente, Sture All¨¦n, dice que 14 miembros son m¨¢s que suficientes para designar el candidato elegido, y cree impensable un cambio de los estatutos.
Entre las principales razones esgrimidas como motivo para su decisi¨®n, Ahnlund mencion¨® su total desacuerdo con el secretario permanente de la instituci¨®n, Sture All¨¦n, a quien describi¨® como un hombre que desde su nombramiento en 1956 "ha acumulado demasiado poder en sus manos", pese a no ser un experto en literatura, sino un ling¨¹ista especializado en el tratamiento por ordenador del idioma. Ahnlund critica asimismo un cierto anquilosamiento de la Academia, la que a su juicio debe ser un organismo m¨¢s vivo y abierto hacia la sociedad.
El alejamiento de Ahnlund, de 73 a?os, es un paso m¨¢s en un proceso de crisis del organismo, que estall¨® en 1989 a prop¨®sito de la condena a muerte decretada por el r¨¦gimen iran¨ª contra Salman Rushdie. La negativa de la Academia a pronunciarse p¨²blicamente como tal en esa oportunidad condenando la medida y en solidaridad con el escritor, con el argumento de que ello supon¨ªa un pronunciamiento pol¨ªtico, no fue compartida por todos los miembros. Tres de ellos, Kerstin Ekman y el ex secretario Lars Gyllensten, primero, y Werner Aspenstr?m, un poco m¨¢s tarde, no volvieron m¨¢s a la Academia.
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