?Hay alg¨²n actor malo?
No s¨®lo de cine espa?ol se aliment¨® ayer la programaci¨®n a concurso del festival. La pel¨ªcula de Carlos Saura fue acompa?ada por Trojan Eddie, de Gilles Mackinnon, un filme irland¨¦s con producci¨®n del brit¨¢nico Channel Four y pro tagonismo estelar de Stephen Rea y Richard Harris, una fallida ficci¨®n considerablemente s¨®rdida y barriobajera a medio camino entre el retrato de presunto perdedor con deudas y el apunte sociol¨®gico , que no contribuy¨® ciertamente a elevar el list¨®n de una jornada anodina en lo que a la Secci¨®n Oficial se refiere.Trojan Edd¨ªe narra la historia de un vendedor y charlat¨¢n de oficio (Rea), ex convicto y atenazado por la deuda contra¨ªda con un veterano g¨¢nster local (Harris) que le da trabajo, con un pasado sentimental que parece siempre a punto de pasarle factura y con un turbio asunto a?adido: por amistad, llegar¨¢ a traicionar a su empleador ayudando al sobrino de ¨¦ste a birlarle dinero y (joven) esposa. Todo esto, que sobre el papel indica la direcci¨®n del filme criminal, es, no obstante, mostrado con un ritmo cansino y una estructura de rompecabezas cuyas piezas parece que nunca terminar¨¢n de encajar satisfactoriamente, y que cuando lo hacen ya ha discurrido por lo menos la mitad del metraje del filme y se corre el riesgo de que el inter¨¦s se haya esfumado.
La raz¨®n por la cual ¨¦ste se mantiene no es tanto por algunos hallazgos de s¨®rdida efectividad -la forma que tiene el filme de mostrar la vida de las clases populares irlandesas, aspecto que comparte con muchas otras pel¨ªculas de igual procedencia-, sino por la existencia de un m¨¢s que efectivo, extraordinario elenco de actores. No vamos a descubrir, a estas alturas, el oficio de Stephen Rea, cuyo arquetipo de hombre an¨®nimo, triste y desamparado, tan bien le va a su personaje en este filme, ni al veterano Harris, a quien se le tolera, como muchas otras veces, su tendencia a la desmesura.Los secundarios
Ellos se lucen a modo, pero quienes en realidad sostienen la ficci¨®n son los magn¨ªficos secundarios, siempre ajustados a los papeles, que construyen una galer¨ªa de retratos de autenticidad impecable, y que confirman la apreciaci¨®n de que una de la cosas m¨¢s dif¨ªciles de encontrar en la Verde Er¨ªn es un mal actor.
Y mientras se espera para hoy el pase del escandaloso Trainspotting, de Danny Boyle, el p¨²blico se agolpa ante la sala principal del festival, el palacio Victoria Eugenia, para ver la ¨²ltima maravilla del t¨¢ndem Tim Burton-Henry Selick, James y el melocot¨®n gigante, un filme de animaci¨®n en la estela de Pesadilla antes de Navidad, que tiene como origen e inspiraci¨®n uno de los libros (supuestamente) infantiles de Roald Dahl.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.