"No podemos enterrar un mito"

Sabino Padilla, el m¨¦dico-preparador de Miguel Indur¨¢in,, analiza las causas y las consecuencias del abandono del ciclista en la Vuelta desde el punto de vista estrictamente m¨¦dico. Es un hombre que ha seguido atentamente -tratando de dominar su capacidad de sorpresa en algunas ocasiones todo lo que se ha dicho y escrito sobre Indur¨¢in. a lo largo de las ¨²ltimas semanas. Por ese motivo, Padilla recomienda no dramatizar, recalca que la Vuelta no hipoteca la decisi¨®n de futuro del navarro y pide un esfuerzo de reflexi¨®n por parte (de todos. "Hay que cuantificar todas las variables para encontrar la respuesta a las preguntas claves: ?qu¨¦ es lo que soy? ?qu¨¦ es lo que puedo hacer?". Padilla hace una reflexi¨®n sobre c¨®mo se interpretan los triunfos de Indur¨¢in: "A cualquier deportistas una medalla de oro ol¨ªmpica le dura toda la vida. A Indur¨¢in, lo m¨ªnimo">El diagn¨®stico. "Indur¨¢in est¨¢ pasando un proceso infeccioso que ha sido el factor determinante de su abandono en la Vuelta. Empez¨® como una sinusitis que, como consecuencia, se convirti¨® en bronquitis. Lo prioritario ahora es que se cure, f¨ªsicamente: la mala salud es lo que le ha hecho bajarse de la bicicleta: no estaba al 100%, ten¨ªa pocos recursos de recuperaci¨®n, que se minaban d¨ªa a d¨ªa, y se le a?adieron los problemas de salud".>

La causa. "Cuando la capacidad de recuperaci¨®n no es perfecta, los mecanismos de defensa del organismo est¨¢n m¨¢s bajos y m¨¢s alta es la posibilidad de una infecci¨®n. Es un problema que suele darse a comienzos y finales de temporada. Un s¨ªmil: es como cuando se quiere acelerar la maduraci¨®n de una fruta verde y mantener fresca una fruta pasada. Quiz¨¢s el proceso infeccioso pueda ser la resultante: un sobreesfuerzo que le ha pasado un poco de factura. Cada d¨ªa respond¨ªa menos. Tambi¨¦n a comienzos de temporada Indur¨¢in sufri¨® catarros y tuvo que retirarse de alguna carrera [Vuelta a Andaluc¨ªa]. Pero eso es normal, le pasa a todos los deportistas. La Vuelta ten¨ªa dos fases. En la primera, hasta la contrarreloj, donde se trataba de ver su capacidad de rodar en solitario, Miguel hab¨ªa estado ah¨ª, no estaba muy da?ado. En la segunda, quedaba la inc¨®gnita de su potencial de recuperaci¨®n, que es lo que la monta?a puso a prueba".

> Ahora. "No s¨¦ c¨®mo va a plantear Miguel sus perspectivas de futuro. Hay que reflexionar y hacer balances objetivos. Miguel ha tenido una temporada muy buena [triunfos en la Vuelta al Alenetejo, Astur¨ªas, Bicicleta Vasca, Dauphin¨¦ Lib¨¦r¨¦, campe¨®n ol¨ªmpico], que firmar¨ªa el 99% de los corredores del pelot¨®n. Es como si un corredor de marat¨®n corriera normalmente por debajo del r¨¦cord mundial, a 2.05 o 2.06, y un d¨ªa hiciera 2.09 y empezara a cuestion¨¢rsele. Nos habr¨ªa gustado a todos, que este a?o tambi¨¦n hubiera ganado todo. Cada a?o que ha pasado, en vez de quitarle objetivos, le hemos a?adido m¨¢s porque ve¨ªamos que es un hombre capaz de ellos y de encadenarlos a?o tras a?o: Tours, Mundial, r¨¦cord de la hora, Vuelta... Ahora, lo primordial es que cure la salud; si no, no puede plantearse objetivos".

> El futuro. "Para plantearlo, hay muchas variables que cuantificar desde el punto de vista f¨ªsico: el potencial f¨ªsico, el potencial fisiol¨®gico, la voluntad, la capacidad de entrenamiento. Son las variables que nos estudiamos todos los a?os a la hora de planificar los objetivos. Son las que nos

dan la respuesta a las preguntas primordiales: ?qu¨¦ es lo que soy? ?qu¨¦ es lo que puedo hacer? El asunto no es tan sencillo. No nos lo podemos plantear pensando que es una m¨¢quina, as¨ª que es imposible analizar la situaci¨®n mirando s¨®lo su cuerpo. Si se hace una predicci¨®n eliminando ciertos factores, siempre se llega a una conclusi¨®n err¨®nea porque los eliminados pueden ser los factores decisivos.> Dudas. "Su participaci¨®n en la Vuelta no ha hipotecado su futuro. No hay que dramatizar. Hay que dejarle disfrutar de lo que ha hecho, algo que nunca se ha logrado por su propia capacidad. El logro de un objetivo le ha supuesto marcarse otro, y un fallo en el segundo ha hecho que se le cuestione el primero. No podemos enterrar un mito. A cualquier otro deportista, una medalla de oro ol¨ªmpica le dura toda la vida, a Miguel le ha durado lo m¨¢s m¨ªnimo. Tomemos el caso de Michael Johnson. El atleta estadounidense gan¨® dos medallas de oro durante los Juegos. Despu¨¦s sigui¨® compitiendo. Perdi¨® dos carreras y nadie se atrevi¨® por eso a quitarle brillo a sus victorias ol¨ªmpicas".