Los jueces se rebelan contra el Consejo por el horario de las guardias

Los jueces de instrucci¨®n de Madrid (los que investigan delitos) est¨¢n en pie de guerra contra el Consejo General del Poder Judicial. Los d¨ªas de libranza tras las guardias (los dos de que dispon¨ªan antes han quedado reducidos a uno o ninguno), el origen del conflicto.Desde que el 12 de agosto el Consejo diera luz verde al reglamento sobre el turno de guardia (en vigor desde el 1 de septiemre), el revuelo invade casi sin excepci¨®n los 46 juzgados de instrucci¨®n de Madrid. Los magistrados decidieron el pasado 25 obviar el nuevo reglamento y regular las guardias por su cuenta.

Pr¨¢cticamente ning¨²n magistrado est¨¢ de acuerdo con el nuevo reglamento, que vulnera, explica una portavoz, la normativa laboral internacional sus crita por Espa?a. En la capital funcionan a diario tres juzgados de guardia, uno menos que en Barcelona. Dos de ¨¦stos se dedi can a interrogar a los detenidos que les lleva la polic¨ªa (en torno a 50 o 60 diarios); y el tercero, a las incidencias que surgen (le vantamiento de cad¨¢veres, en tradas y registros en casas, h¨¢beas corpus ... ).

La guardia comienza a las 9.00 y, en teor¨ªa, debe concluir 24 horas despu¨¦s. Al salir, y antes del nuevo reglamento, el juez dispon¨ªa de 48 horas de descanso. Pero esto es la teor¨ªa. En realidad, el ¨²nico juez que s¨ª permanec¨ªa en el juzgado las 24 horas que dura la guardia era el de diligencias; los dos de detenidos, en cambio, se marchaban a casa cuando terminaban: unas veces bien entrada la madrugada y otras por la tarde-noche. Esas 48 horas de asueto posterior a la guardia ten¨ªan una consecuencia grave para los usuarios: durante dos d¨ªas hab¨ªa seis juzgados cerrados.

El anterior Consejo decidi¨® poner coto a esta situaci¨®n. No pod¨ªan haber seis juzgados cerrados al p¨²blico simult¨¢neamente. Desde el Consejo se adujo, adem¨¢s, que lo normal era que los dos juzgados de detenidos terminasen su faena por la tarde-noche, y que, por tanto, pod¨ªan trabajar al d¨ªa siguiente.Incidencias

Los jueces est¨¢n de acuerdo en que los juzgados permanezcan abiertos siempre, pero califican de "barbaridad" la nueva regulaci¨®n. Esta establece que los dos juzgados de detenidos finalicen su jornada a las nueve de la noche y trabajen al d¨ªa siguiente.

No es excepcional, sin embargo, que la Guardia Civil lleve detenidos a los juzgados a partir de las 21.00 horas, e incluso de madrugada. ?Qui¨¦n los interroga? El nuevo reglamento encomienda esta labor al juez de diligencias, que s¨ª debe trabajar las 24 horas y a quien el reglamento faculta para descansar el d¨ªa siguiente. M¨¢s inconvenientes: ?y qu¨¦ ocurrir¨ªa si a las 21.30 llega cargado de bolas de coca alg¨²n detenido del aeropuerto de Barajas y el magistrado de diligencias est¨¢ levantando un cad¨¢ver? Su vida peligra y la decisi¨®n de ingresarle en un hospital se debe adoptar sin demora.

Adem¨¢s, no siempre es posible acabar la jornada a las 21.00, cuentan los jueces. A veces llegan detenidos a las nueve menos cinco.

Esos interrogatorios -y m¨¢s si se trata de delitos graves- no se pueden desarrollar en cinco minutos. A veces tardan horas.

En todo esto fundamentan los jueces el malestar que les ha llevado a obviar el reglamento. El acuerdo de los jueces establece dos d¨ªas de descanso para el juez de diligencias y uno para los dos de detenidos si han terminado de trabajar tarde.

Este horario regir¨¢ los pr¨®ximos 30 d¨ªas y se abrir¨¢ a¨²n m¨¢s en beneficio de los jueces "si no se alcanza una soluci¨®n dialogada en este plazo", se?ala una portavoz.