Propaganda

Entro en mi portal y miro directo al buz¨®n: pura rutina. Pero... ?sorpresa!: una revista su interior... ?Qu¨¦ ilusi¨®n! Un momento, hay algo que no concuerda, aunque podr¨ªa ser casualidad: ?todos mis vecinos (unas 22 familias) tienen revista en su buz¨®n!... ?Casualidad? ?No!, propaganda. Voy directamente a mirar el n¨²mero de p¨¢ginas de la revista y ?horror!: son 360 por revista. Mi primer pensamiento: "Dan asco, es vomitivo". El segundo: "Nunca he estado en este comercio pero, gracias a esta revista, creo que jam¨¢s ver¨¢n un pelo de esta cabeza en ¨¦l".El problema es matem¨¢tico: son 300 p¨¢ginas por revista 5 gramos de papel pesados). o en mi bloque, ya Van 22 reas (6.600 p¨¢ginas), que son o m¨¢s de 11 kilos de papel! Y esto, multiplicado por los vete a saber cu¨¢ntos bloques, da un total de... ?impresionante! Deben ser unas cuantas toneladas de papel que, al fin y al cabo ni servir¨¢n para mucho ni se reciclar¨¢n en su totalidad.

Pero lo peor de todo no es el hecho en s¨ª, sino lo que detr¨¢s de ¨¦l se esconde: la pasividad del Estado ante el problema y las pocas medidas limitadoras y 1 o restrictivas que existen ante la propaganda masiva (folletos, revistas y dem¨¢s).

Pero el caso es que ni la cuarta parte del papel utilizado en las propagandas es reciclado. Seg¨²n creo, y si el Estado o las instituciones pertinentes siguen en su postura, s¨®lo falta esperar el momento, y cuando llegue, lamentar que en la Tierra la deforestaci¨®n sea total-