Atractivo y desigual policiaco

Despu¨¦s de escribir, producir y dirigir los prometedores polic¨ªacos Una sombra en el Jard¨ªn (1988) y Manila (1991), el barcelon¨¦s Antonio Chavarr¨ªas comete el grave error de cambiar de g¨¦nero y perderse por los siempre insondables vericuetos de la denominada "comedia catalana" para hacer la desafortunada El hundimiento del Titanic (1993) Superado este grave fallo, vuelve al policiaco con Susanna, el g¨¦nero en que realmente se mueve bien.En esta ocasi¨®n Chavarr¨ªas ha partido de tres personajes tan interesantes como diferentes, tras los que se esconden mundos muy distintos e igualmente sugerentes, para hacer un atractivo y desigual policiaco.

La raz¨®n de esta dispersidad estriba en que, por un lado, el material manejado es demasiado amplio y rico, pero, por otro, carece de la necesaria estructura dram¨¢tica para sintetizarlo. Susanna parte del choque entre tres personajes muy distintos. Un empleado que no tiene inconveniente en apropiarse de vez en cuando de alg¨²n dinero de su empresa, tener una historia con una mujer atractiva y que en el curso de la narraci¨®n se casa y tiene un hijo. Una joven te?ida de rubia platino, sola en la vida y que ha pasado una temporada en la c¨¢rcel por alg¨²n mal paso dado con anterioridad y un cumplidor, marroqu¨ª, perteneciente a una amplia familia musulmana, desde hace alg¨²n tiempo instalado en Barcelona, y muy enraizada en sus tradiciones.

Excesos

Antonio Chavarr¨ªas consigue definir con claridad los tres personajes y los peculiares mundillos en que se mueven los protagonistas, pero no acierta con la dosificaci¨®n de los tiempos de su narraci¨®n, se le va de la mano la historia por culpa de un gui¨®n donde todo se diversifica en exceso y avanza a velocidades muy distintas.Tampoco le ayuda mucho a la hora de narrar Susanna la estructura dram¨¢tica elegida. Funciona bien que casi todo sea una larga vuelta hacia detr¨¢s a partir de la detenci¨®n del presunto culpable y el descubrimiento del asesinato, pero est¨¢n mal integradas en el conjunto los otros dos saltos hacia detr¨¢s que existen en el relato. As¨ª como que al principio se concentren varios meses de la vida del protagonista en muy poco tiempo, y luego se pase a unas inacabables escenas de ceremonias familiares. Adem¨¢s de que los personajes entren y salgan de la historia m¨¢s a voluntad de su autor que de sus necesidades dram¨¢ticas.

Otro grave inconveniente de la pel¨ªcula es su desigual reparto. El actor marroqu¨ª Said Amel es quien resulta mejor en su confuso papel.