Lo justo
Desde el fondo. Ambas selecciones comenzaron con una excesiva preocupaci¨®n por mantener la seguridad defensiva. Parec¨ªa un partido de tenis donde los dos jugadores se dedicaban a pasar continuamente la pelota desde el fondo de la pista con temor a subir a la red. Se esperaban en las cercan¨ªas del ¨¢rea sin arriesgar en absoluto en acciones ofensivas.Incomprensible. Qu¨¦ m¨¢s quiere un equipo que el otro renuncie casi totalmente al ataque. Fue incomprensible la actitud de los checos que cedieron todo el terreno al equipo espa?ol a pesar de jugar en casa. Cab¨ªa esperar algo m¨¢s con hombres de la calidad y velocidad de Poborski, Kuka y Berger. De uncis subcampeones de Europa. En el segundo tiempo, al menos, mostraron otra cara.
M¨¢s ambici¨®n. A falta de 15 minutos para terminar el primer tiempo, Espa?a se mostr¨® m¨¢s ambiciosa y consigui¨® crear algunos problemas a los checos. Ya no abusaron de los lanzamientos en largo. Ra¨²l y Guerrero bajaron al centro del campo a recibir, controlaron el bal¨®n con velocidad y precisi¨®n, apoyados por la habilidad de Alfonso. Llegaron las ocasiones y el partido entonces dio un giro total.
Apuros. Espa?a pas¨® los primeros minutos del segundo tiempo con algunos apuros. Al contrario que en la primera mitad, los checos adelantaron sus l¨ªneas y presionaron en el campo espa?ol. Sin crear demasiado peligro, inquietaron con insistencia el marco de Zubizarreta, que se mostr¨® en todo momento muy seguro. En esta fase, los jugadores espa?oles tuvieron muchas dificultades para controlar el bal¨®n.
Al 50%. En conclusi¨®n, buen resultado ante el subcampe¨®n de Europa. Clemente hab¨ªa confeccionado una selecci¨®n m¨¢s ofensiva de lo habitual. Atac¨® cuando se dio cuenta de la pasividad checa y se defendi¨® con bastante orden cuando los checos apretaron. Resultado justo que mantiene el optimismo. Se repartieron el juego, las ocasiones y el partido. Buen deb¨² de los j¨®venes, Ra¨²l, R¨ªos y Urzaiz.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.