Choque por el recorte de paracaidistas
Alexandr L¨¦bed ha perdido la batalla para evitar el dr¨¢stico recorte de las fuerzas de paracaidistas de Rusia, las unidades de ¨¦lite de las que procede el general y en las cuales reina un ambiente de gran malestar por las p¨¦simas condiciones sociales y la reducci¨®n acelerada de efectivos.En teor¨ªa, los paracaidistas son id¨®neos para convertirse en uno de los elementos clave de un ej¨¦rcito basado en unidades m¨®viles, tal como establece la doctrina militar rusa. Su reducci¨®n ha enfrentado abiertamente a L¨¦bed con su protegido, el ministro de Defensa, Igor Rodi¨®nov, que obtuvo su cargo gracias al secretario del Consejo de Seguridad, pero que ha adoptado su propia pol¨ªtica.
L¨¦bed ha calificado de "delictiva" la disposici¨®n que el ministro firm¨® el 24 de septiembre, a tenor de la cual los paracaidistas pasar¨¢n de 64.300 hombres a 48.500. L¨¦bed, que el martes asisti¨® a una reuni¨®n del Consejo Militar de las tropas de paracaidistas, se?al¨® que esta reducci¨®n, a efectuar para el 15 de diciembre, afecta a 4.994 oficiales y suboficiales, de los cuales un 60% no tienen vivienda. Muchos llevan desde julio sin cobrar sus sueldos.
Pese a las duras cr¨ªticas del general, Rodi¨®nov quit¨® ayer importancia a las reducciones en presencia del secretario de Defensa norteamericano, William Perry. El ministro dijo que las unidades de paracaidistas no van a ser disueltas, como teme L¨¦bed, sino mejoradas, y afirm¨® que si el secretario del Consejo de Seguridad fuera zapador defender¨ªa con la misma energ¨ªa a los zapadores. El s¨¢bado pasado, L¨¦bed estuvo en el centro de mando de los misiles estrat¨¦gicos, en la localidad de Odinzovo, en las afueras de Mosc¨². Las visitas a las unidades militares han sido uno de los argumentos utilizados por el ministro del Interior ruso, Anatoli Kulikov, para argumentar que L¨¦bed prepara un golpe de Estado.
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