Los papeles de Conde

LA LLEGADA de los documentos de la comisi¨®n rogatoria sobre la trama suiza de sociedades vinculadas al ex banquero Mario Conde ha abierto el ¨²ltimo cap¨ªtulo en la instrucci¨®n del caso Banesto. No sin cierta alarma de ¨²ltima hora sobre el destino de esos documentos, que han tardado 20 d¨ªas en llegar a la Audiencia Nacional. La ventaja que presenta esta comisi¨®n rogatoria es que su contenido se conoce: tanto el juez como el fiscal y las partes estuvieron presentes en la audiencia de los dos testigos principales en Lausana.Al haber asistido legalmente a la declaraci¨®n del fiduciario Paolo Gallone, una de las partes -Banesto- solicit¨® al juez en mayo pasado la apertura de juicio oral contra dos personas que permanecen fuera del procedimiento penal: el abogado Mariano G¨®mez de Lia?o y el ex presidente de Asturiana del Zinc, Francisco Javier Sitges. Seg¨²n Gallone, fueron estas dos personas las que le encargaron formar las tres sociedades suizas sobre las que el juez Garc¨ªa-Castell¨®n deseaba conocer detalles: Kaneko, Asni Investments y Jamuna. La primera fue formalmente asignada a Conde para que ¨¦ste canalizara su patrimonio privado fuera de Espa?a, mientras que las otras dos quedaron como propiedad, al menos formal, de G¨®mez de Lia?o y de Sitges. Mientras Kaneko sirvi¨® supuestamente para lavar dinero que Conde manten¨ªa fuera de Espa?a, envi¨¢ndolo a su sociedad espa?ola Asebur, las otras dos participaron en dos operaciones presuntamente delictivas (Promociones Hoteleras e Isolux), llev¨¢ndose dinero a Suiza.

La narraci¨®n de Gallone es altamente instructiva porque explica el funcionamiento del grupo como una banda organizada: qui¨¦n manda, qui¨¦n transmite instrucciones, d¨®nde se invierte y c¨®mo se distribuye el trabajo. Una vez traducidos, los papeles suizos pasar¨¢n a manos del juez. Como est¨¢ pendiente un recurso de apelaci¨®n en la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional -que deber¨¢ resolver, entre otros puntos, sobre la inculpaci¨®n o no de G¨®mez de Lia?o y Sitges-, el juez puede enviar los documentos a la citada sala y dar traslado de dicha decisi¨®n a las partes personadas.

En este caso ser¨ªa la sala la que deber¨ªa determinar qu¨¦ se hace despu¨¦s. La l¨®gica sugiere que la sala env¨ªe al juez instructor -que fue quien pidi¨® la comisi¨®n rogatoria- la documentaci¨®n para que abra una pieza separada y se investiguen los hechos que pudieran derivarse de la declaraci¨®n de Gallone.

El abogado suizo se ha convertido en un testigo de cargo fundamental en el caso. No s¨®lo porque conoce la trama de las sociedades suizas, sino tambi¨¦n porque ha sido administrador de la Fundaci¨®n Melvin, que Conde, G¨®mez de Lia?o, Sitges y Arturo Roman¨ª crearon en el principado centroeuropeo de Liechtenstein en 1989. Es esta fundaci¨®n secreta la que gestionaba, con garant¨ªa de sus bienes, los cr¨¦ditos en la Banque Cantonale Vaudoise (Lausana) y mov¨ªa el dinero que iba y ven¨ªa de las sociedades suizas. Si el juez remite los documentos a la sala que ver¨¢ los recursos de apelaci¨®n y ¨¦sta decide reenviar la inculpaci¨®n de, G¨®mez de Lia?o y de Sitges junto con la comisi¨®n rogatoria para que se instruya como pieza separada, la Fijaci¨®n de la fecha de juicio oral del caso Banesto no tiene por qu¨¦ demorarse.

Una vez resueltos los recursos de apelaci¨®n -que afectan tambi¨¦n a otras personas, como el financiero Jacques Hachuel- y abierta la pieza separada para la trama suiza, el juez puede elevar los 240 tomos del sumario a la Sala de lo Penal para que ¨¦sta nombre un ponente y en un plazo razonable dicte un auto de se?alamiento de fecha de juicio oral.

La pieza separada con G¨®mez de Lia?o y Sitges se unir¨ªa, tal como prev¨¦ el procedimiento abreviado, a la causa principal m¨¢s tarde. Todo esto no parece presentar complicaciones procesales. Sin embargo, la reedici¨®n estos d¨ªas del clima de chantaje que ya conoci¨® el Gobierno de Felipe Gonz¨¢lez en 1995 y las maniobras en diversas instituciones aconsejan no dar nada por hecho.

La firmeza y la profesionalidad ser¨¢n desafiadas por Conde y sus socios hasta el ¨²ltimo minuto para conseguir que el caso Banesto encalle. De la acci¨®n ejemplar y r¨¢pida de la justicia en el caso Banesto, paradigma de las irregularidades financieras de los ¨²ltimos a?os, depende en buena medida la credibilidad del sistema.