El bailar¨ªn Maximiliano Guerra reta a la fama en la Zarzuela
Algunos le consideran como uno de los mejores bailarines del mundo, y sin embargo le falta fama. Maximiliano Guerra, argentino de 29 a?os, tiene una cita con el p¨²blico madrile?o los pr¨®ximos cinco d¨ªas. "No me interesa la fama. Lo que me importa es que las cosas salgan bien cada vez que salgo al escenario", dice el bailar¨ªn, que tendr¨¢ la oportunidad de demostrar estas palabras en el teatro de la Zarzuela a partir de ma?ana.
El programa es de lo m¨¢s variopinto. Las piezas elegidas para el p¨²blico madrile?o comienzan con una sucesi¨®n de tangos y milongas de su Argentina natal bajo el t¨ªtulo Suite porte?a. El espect¨¢culo sigue con una pieza de danza contempor¨¢nea (Bailando Honnenger, con m¨²sica de Arthur Honneger) y termina con dos n¨²meros al m¨¢s puro estilo cl¨¢sico: Diana y Acte¨®n y el Don Quijote que compuso Minkus.Guerra participa en el Festival de Oto?o como bailar¨ªn invitado del Ballet del teatro Col¨®n de Buenos Aires, una compa?¨ªa que visita Madrid por primera vez (Guerra, en cambio, ya lo ha hecho en otra ocasi¨®n). Esa compa?¨ªa fue tambi¨¦n la cuna del gran Jorge Donn. Y de Julio Bocca, del que tambi¨¦n se habla como uno de los mejores bailarines del planeta. Sobre una posible rivalidad entre las dos figuras, Guerra se apresura a decir: "Nos criamos juntos en el instituto. Cada uno tiene que reconocer al otro como lo que es, y al mismo tiempo hay que poner claro que somos diferentes. Los artistas no se pueden comparar".
Maximiliano Guerra entr¨® en contacto con la danza a los 10 a?os. Dice que s¨®lo tuvo que renunciar al futbol para seguir su carrera de bailar¨ªn. Pero a nada m¨¢s. A los 16 a?os era un profesional al que s¨®lo le ca¨ªan papeles para solistas y primeros bailarines. Ahora, casado y con una hija, se confiesa un afortunado que desde el principio recibi¨® ofertas de grandes compa?¨ªas extranjeras. Ha trabajado con el Ballet de Los ?ngeles y con la ¨®pera de Berl¨ªn. "En Argentina, algunos bailarines tienen que salir para llegar a ser alguien. Yo tuve la fortuna de no sufrir eso".Guerra se define como "un artista invitado internacional". Va de aqu¨ª para all¨¢ y colabora con distintas compa?¨ªas. Ahora, con la Scala de Mil¨¢n y con el Col¨®n de Buenos Aires. "Hace nueve anos que vivo en el extranjero. Pretendo quedarme en Mil¨¢n. Pero tambi¨¦n darle todo el apoyo y el amor que siempre le di al teatro Col¨®n, bailar con ellos es importante para m¨ª".
Bailar con Duato
Tambi¨¦n hace giras con otros grandes grupos. Y asegura que no le har¨ªa ascos a una proposici¨®n de Nacho Duato, el director de la Compa?¨ªa Nacional de Danza: "Aceptar¨ªa con much¨ªsimo gusto y much¨ªsimas ganas una invitaci¨®n de Nacho Duato, porque es uno de los core¨®grafos que m¨¢s admiro en estos momentos", dice Guerra."Creo que uno genera la vida que tiene. Hay que vivir para poder tener experiencias, un archivo de experiencias que luego sirven para salir a bailar". Y a?ade: "Como artista me enamoro de todos los personajes, pero hay uno que se lleva muy bien conmigo: Espartaco. Un libertador, luchaba contra la opresi¨®n".
Guerra dice que antes de salir a un escenario piensa como un toro, porque es Tauro: "Ah¨ª voy, a la corrida", dice. "Voy a seducirles. Yo creo que el artista, con el p¨²blico, tiene que llegar a sentir casi un orgasmo; es como hacer el amor".
Ballet del teatro Col¨®n de Buenos Aires, con Maximiliano Guerra. Teatro de la Zarzuela (Jovellanos, 4, metro Banco de Espa?a). 23 al 27 de octubre (20.00). De 1.900 a 4. 100 pesetas.
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