Ventaja de la derecha en la primera vuelta de las presidenciales b¨²lgaras
Una segunda vuelta el domingo pr¨®ximo decidir¨¢ el nombre del presidente de Bulgaria durante los pr¨®ximos cinco a?os entre los dos aspirantes m¨¢s votados ayer. Confirmando los pron¨®sticos, y seg¨²n las proyecciones difundidas a medianoche, el candidato anticomunista Petar Stoyanov, designado por la coalici¨®n Uni¨®n de Fuerzas Democr¨¢ticas, obtendr¨¢ entre el 41% y el 44% de los votos, aventajando en 15 puntos al representante del Partido Socialista gobernante, Ivan Marazov. El tercero m¨¢s votado ha sido Georges Ganchev, con un 22% de los sufragios. Acudieron a las urnas menos del 60% de los votantes potenciales.
De confirmarse estas proyecciones, obtenidas promediando hasta cuatro sondeos diferentes a pie de colegio electoral, la primera vuelta de las presidenciales b¨²lgaras supone una rotunda descalificaci¨®n de la gesti¨®n de los ex comunistas, en el poder desde 1994. La dram¨¢tica situaci¨®n econ¨®mica del pa¨ªs balc¨¢nico y la confrontaci¨®n entre sus dos grandes bloques pol¨ªticos otorgan a estos comicios un valor muy por encima del casi simb¨®lico atribuido por la Constituci¨®n a la Jefatura del Estado que ahora abandona Zhelyu Zhelev. Derecha e izquierda pugnan por elevar a la primera magistratura del pa¨ªs m¨¢s a un hombre de partido o intereses que al encargado de representar las aspiraciones del conjunto de los ciudadanos.
M¨¢s de seis millones y medio de votantes estaban convocados a escoger entre 13 parejas (presidente y vicepresidente), cuyos nombres figuraban escritos en otras tantas papeletas id¨¦nticas. En sendas conferencias de prensa celebradas anoche, los tres aspirantes m¨¢s votados encontraron motivos para felicitarse y concluir que nada est¨¢ decidido. Primeras tras casi dos a?os de Gobierno socialista, los comicios son en realidad un plebiscito sobre el rumbo impuesto al pa¨ªs balc¨¢nico por el primer ministro Zhan Videnov. Los resultados oficiales de la primera ronda se anunciar¨¢n el martes.
La ¨²nica inc¨®gnita abierta es que porcentaje de electores apoyar¨¢ en la vuelta definitiva al candidato de los ex comunistas, Marazov, tan severamente vapuleado ayer. Ganchev, que se apresur¨® a considerar su 22% como el nacimiento de una nueva fuerza pol¨ªtica en Bulgaria, descart¨® que tenga un pacto con los rojos (socialistas) para apoyarles el pr¨®ximo domingo. Este demag¨®gico hombre de negocios, cuyo nombre real es otro y cuyas aspiraciones son tan desconocidas como el origen de su fortuna, ha recibido una cuota importante del voto-protesta.
Las presidenciales b¨²lgaras se desarrollan en un paisaje de grav¨ªsima crisis econ¨®mica y deterioro social, en el que emerge una delincuencia organizada cuya manifestaci¨®n m¨¢s reciente ha sido el asesinato este mismo mes del ex primer ministro Andrei Lukanov.
"Hay que luchar contra la corrupci¨®n"
"Soy un ex deportista y como tal s¨¦ que hay que esperar hasta el ¨²ltimo minuto antes de cantar victoria". Petar Stoyanov, candidato de una amplia y heterog¨¦nea coalici¨®n derechista, es el favorito para ocupar la jefatura del Estado b¨²lgaro. Su talante y sus declaraciones parecen encajar poco con el puesto esencialmente ceremonial que perfila la Constituci¨®n de 1991.
"A diferencia de casi todos los dem¨¢s partidos socialistas de Europa central y oriental, Zhan Videnov [primer ministro] no ha dado a los socialistas b¨²lgaros la oportunidad de democratizarse. Ni tampoco ha realizado los cambios necesarios para salvar a Bulgaria. Los ex comunistas, prisioneros de la nostalgia, est¨¢n divididos entre su deseo de ser fieles a su electorado y el cumplimiento de sus deberes reformistas". El candidato del partido gobernante a la presidencia y principal rival de Stoyanov es el ministro Ivan Marazov.
El abogado Stoyanov, un especialista en divorcios de 44 a?os, sin especial carisma, respira optimismo. Agradece el apoyo de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar y admite que considera imprescincible una convocatoria de elecciones parlamentarias, aunque la Constituci¨®n no incluye esa decisi¨®n entre sus poderes. "Si gano significar¨¢ que el pueblo no conf¨ªa en el Gobierno y cambiar¨¢ por completo la situaci¨®n pol¨ªtica. La p¨¦rdida de confianza en el Partido Socialista conducir¨¢ a comicios anticipado".
Stoyanov respeta "el intelecto y patriotismo" de Sime¨®n de Bulgaria, pero, si es elegido, aceptar¨¢ y jurar¨¢ la Constituci¨®n de la Rep¨²blica. Enseguida, y sobre una eventual restauraci¨®n mon¨¢rquica, da una de arena: "Lo m¨¢s importante es el deseo del pueblo; en este sentido, vox populi, vox Dei".
"Bulgaria necesita reformas claras. Hay que pensar m¨¢s en el pa¨ªs y menos en el partido", recita Stoyanov. "El nuevo presidente tendr¨¢ que luchar contra la delincuencia y la mafia, contra la corrupci¨®n instalada en el poder. Queremos ser lo antes posible miembros de pleno derecho de la UE y de la OTAN".
Sobre el cierre o saldo de empresas estatales ruinosas, el precio puesto por el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial para acudir en socorro de la ag¨®nica Bulgaria, Stoyanov cree que "es muy doloroso, pero necesario".
"Monarqu¨ªa y fascismo unidos para los b¨²lgaros"
"Habr¨¢ dos vueltas. En la segunda, el domingo, se unir¨¢n las fuerzas de izquierda y yo ser¨¦ el ganador. Entonces, el clima en Bulgaria cambiar¨¢ a mejor". Lo dice con poca convicci¨®n Iv¨¢n Marazov, de 54 a?os, candidato gubernamental a la presidencia, que defiende la ejecutoria del primer ministro socialista Videnov y culpa a la coalici¨®n opositora Uni¨®n de Fuerzas Democr¨¢ticas (UDF) de los males del pa¨ªs, "por no haber iniciado las reformas en 1991, cuando comenz¨® a gobernar".
De Mala gana, este experto en Historia del Arte Antiguo acaba por admitir que el Gobierno del que forma parte como ministro de Cultura tambi¨¦n ha cometido errores: "La privatizaci¨®n y la venta de empresas no ha avanzado, b¨¢sicamente por contradicciones ideol¨®gicas en el seno del partido". En un lenguaje menos profesoral, se puede traducir por lucha de facciones socialistas que amenaza el liderazgo de Videnov. Para Marazov, "unas elecciones parlamentarias anticipadas no cambiar¨¢n nada".
El pol¨ªtico socialista acusa a su principal rival, Petar Stoyanov, candidato de la alianza anticomunista UDF, de "decir una cosa al pueblo b¨²lgaro y otra a los extranjeros".
"Sin duda, la crisis economica es muy grave", reconoce, para referirla inmediatamente despu¨¦s a los a?os anteriores a 1994, en que se hizo cargo del tim¨®n el joven primer ministro Videnov. "La ruina de la agricultura en 1992", y la p¨¦rdida del antiguo mercado sovi¨¦tico son sus causas principales. "Hay razones objetivas para la desesperanza colectiva que usted cita, pero en parte se trata de una inquietud f¨®rnentada".
Id¨¦ntica es la receta manejada en su juicio sobre el auge de la corrupci¨®n y la delincuencia, en el que coinciden todos los observadores de la realidad b¨²lgara: "Existe corrupci¨®n, pero comenz¨® con el fin del sistema comunista y el caos que se produjo. No tenemos leyes afinadas y tampoco se persiguen suficientemente los delitos econ¨®micos.
A diferencia de su principal rival de la derecha, fervientemente atlantista, al presidenciable Marazov le parece que "hay mucho tiempo para que el pueblo se pronuncien sobre la OTAN. Creo que el ejemplo espa?ol, un refer¨¦ndum, es el adecuado".
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