Una nueva edad de oro econ¨®mica
Si, como anuncian los sondeos, el dem¨®crata Bill Clinton es reelegido presidente de Estados Unidos el pr¨®ximo martes, la bonanza econ¨®mica habr¨¢ pesado mucho en la decisi¨®n de los votantes. Pese a lo que diga la negativa, pat¨¦tica y disparatada campa?a del republicano Bob Dole, Estados Unidos conoce una nueva "edad de oro" econ¨®mica.M¨¢s de diez millones de empleos han sido creados desde 1992, dos tercios de ellos, seg¨²n subraya Alan Greenspan, el presidente de la Reserva Federal (el banco central de EE UU), cualificados y bien pagados.
El paro se sit¨²a en el 5,1% de la poblaci¨®n activa, por lo que no es extra?o que el 60% de los norteamericanos, seg¨²n una encuesta del prestigioso diario The New York Times, crea a su presidente cuando ¨¦ste mantiene que la situaci¨®n econ¨®mica del pa¨ªs es buena.
La cosa llega al extremo de que todos los expertos han acogido con alivio la noticia de que el crecimiento en el tercer trimestre de 1996 ha sido del 2,2% del PIB en lugar del 4,8% que se registr¨® en el segundo trimestre del a?o.. Y es que el principal temor de los empresarios, los financieros y los analistas es el que el ritmo sostenido de crecimiento provoque un "recalentamiento" de la econom¨ªa. Pero los datos divulgados el pasado martes confirman que la inflaci¨®n sigue siendo baja, el 1,9% en el tercer trimestre, lo que permite mantener bajos tipos de inter¨¦s.
?Ha encontrado Estados Unidos el secreto del crecimiento sano e indefinido? No habi¨¦ndose visto hasta ahora cosa semejante, no parece probable que as¨ª sea. Muchos expertos creen que la econom¨ªa norteamericana comenzar¨¢ a titubear en 1997, pero para entonces las elecciones presidenciales ya habr¨¢n pasado.
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