"Madrid necesita un circo permanente"

Tiene ocho nietos, y uno en camino. Y el testigo de cinco generaciones anteriores a ¨¦l, que ya eran gente de circo. Seguro que estos antiguos Arag¨®n tambi¨¦n encontraron en este arte lo que el propio Miliki (Carmona-Sevilla, 1929), y es que el circo es un veneno, pero tambi¨¦n un b¨¢lsamo, un espect¨¢culo completo. As¨ª que se anim¨®, acompa?ado por su hijo Emilio Arag¨®n, y en escena con su hija Rita Irasema, a defender desde la arena una nueva visi¨®n del circo, recuperando la personalidad del siglo pasado: el Circo del Arte. Un total de 49 artistas y 60 t¨¦cnicos les acompa?an en este empe?o con el que se han tirado la carpa a la cabeza y con el que ya han recorrido Alcal¨¢ de Henares, Zaragoza, M¨¢laga, Barcelona. Y ahora punto final en Madrid. En el carromato de Miliki, al terminar la funci¨®n, se habla de muchas cosas porque, adem¨¢s de todo, tambi¨¦n ¨¦l pregunta y, sobre todo, desde que debut¨® en el circo a los once a?os hay mucho que recordar. El ya lo ha hecho en un libro de memorias que prepara. En ¨¦l habla sobre su vida. En ella aparecen desde Buster Keaton a Charlie Rivel, Nixon y Tierno Galv¨¢n o hasta el maestro de pesca de Hemingway. Al fondo, de nuevo en el carromato, su "estrella", la reciente distinci¨®n de la Comunidad de Madrid a una buena vida repleta de trabajo.Pregunta. ?C¨®mo ha urgido la idea de un circo hora?

Respuesta. Emilio y yo dese¨¢bamos desde hace tiempo. Comprobamos e hay j¨®venes que no han ido al circo nunca, y otros, los que han ido, lo encontraban deprimente. Hemos querido cambiar esta idea. Es el momento e hacer algo definitivo por el circo.

P. ?Hace falta un circo permanente en Madrid?

R. Desde luego. Hoy no ocurrir¨ªa lo que pas¨® con el Circo Price, hoy no hubiera sido derribado... Es necesario un local permanente para el circo donde pueda haber espect¨¢culo al menos tres o cuatro meses al a?o.

P. ?Piensa que la televisi¨®n hace da?o a los espect¨¢culos, o no es para tanto?

R. Es sano para la televisi¨®n que el p¨²blico salga del sill¨®n.

P. Usted y sus hermanos Gaby y Fof¨® consiguieron lo contrario con los ni?os de los a?os setenta.

R. Nosotros llegamos a Espa?a en el a?o 1973, despu¨¦s de haber hecho mucha televisi¨®n en Am¨¦rica Latina. Vinimos con la experiencia acumulada.

P. Los ni?os conocieron entonces que un payaso no tiene por qu¨¦ tener la nariz roja.

R. Fue nuestra revoluci¨®n; quitamos la nariz roja al payaso, lo humanizamos, y as¨ª, s¨®lo con una nariz respingona, los ni?os nos aceptaban perfectamente. Entonces cant¨¢bamos el Don Pepito y la Gallina Turuleta...

Circo del Arte. Avda. Monforte de Lemos, s / n. (Junto a la Vaguada). Informaci¨®n y reservas: (902) 31 03 20. Hasta el 6 de enero.