Llamamiento
Ante la actual situaci¨®n en la regi¨®n de los Grandes Lagos nadie puede alegar sorpresa o desconocimiento. Muchas eran las voces que se alzaban en el intento de evitar la explosi¨®n de esta situaci¨®n enquistada desde el verano de 1994. Y si este peligro era palpable y evidente para los cooperantes de las diferentes ONG en, la zona, ?c¨®mo no iba a serlo para los expertos de los organismos oficiales de la Comunidad Internacional?Pero, excepto la ayuda humanitaria b¨¢sica, no se ha hecho nada para garantizar un retorno seguro de los refugiados, nada por paliar el agravio al que era sometida la poblaci¨®n zaire?a, a la que se le ha negado la ayuda humanitaria por no ser ruandeses y que, desde su llegada, ha visto aumentar el precio de los productos b¨¢sicos (alimentos, vivienda, medicinas), as¨ª como la inseguridad de su regi¨®n, adem¨¢s de soportar el sistem¨¢tico pillaje de los militares zaire?os.
Se oyen muchas voces pidiendo ayuda a la Comunidad Internacional. ?Por qu¨¦ va a hacerlo ahora si cuando pod¨ªa evitarlo no se movi¨®? ?Por qu¨¦ las grandes potencias internacionales que ha apoyado y armado a tutsis y hutus permanecen ahora inactivas? ?Por qu¨¦ esta lucha en terreno zaire?o, en un pa¨ªs de enorme inter¨¦s geoestrat¨¦gico con elevadas reservas en recursos naturales?
Acabar¨¦ con las palabras del arzobispo de Bukavu, monse?or Munzihirma Mwena Mgabo, asesinado el pasado 30 de octubre: "De hecho, las potencias que se llaman animadoras de la democracia ?no se sirven de la posici¨®n geogr¨¢fica de Ruanda y de la minor¨ªa que gobierna el peque?o pa¨ªs para asegurarse el control del futuro pol¨ªtico, econ¨®mico y estrat¨¦gico del gigante Zaire y puede que de otros pa¨ªses de los Grandes Lagos? ( ... ) Hagamos un llamamiento a la responsabilidad de las naciones y los Estados sedientos de justicia, para que act¨²en por la paz y la estabilidad en esta regi¨®n evitando el desastre que amenaza a sus habitantes". Recogemos su llamamiento y no sabemos qu¨¦ hacer con ella ?o s¨ª?-
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