Quiosqueros
Siempre madrugando, siempre pendientes de sus clientes. En invierno y en verano, con 40 grados o temperaturas bajo cero. Cuando todos estamos en nuestras oficinas, en nuestros despachos o f¨¢bricas, t¨² est¨¢s en tu quiosco, sin aire acondicionado ni calefacci¨®n. No s¨¦ cu¨¢ntas horas al d¨ªa trabajas, ni qu¨¦ temperaturas eres capaz de aguantar. Tu cuerpo ya debe de estar curtido y lo soporta todo. Un d¨ªa cierras el quiosco y por fin vas a disfrutar de tus ganadas y trabajadas vacaciones.Pero t¨² no lo vuelves a abrir, porque nos abandonas en pleno mes de agosto, cuando todos estamos disfrutando del verano. Es ahora tu familia la que est¨¢ ah¨ª, tu mujer y tus hijos. Si los est¨¢s viendo desde alg¨²n sitio, an¨ªmalos a seguir. Gracias por todo, Agust¨ªn de la Fuente, que desde tu quiosco de la calle de Ribadavia en el barrio del Pilar, nos has atendido durante todos estos a?os como si todos fu¨¦ramos tu familia.
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