Dos pistoleros asesinan en Taiwan a un juez y a otras siete personas

Dos pistoleros irrumpieron ayer en la casa de un magistrado de Taiwan, le ataron junto a otras ocho personas presentes y dispararon contra todos y a sangre fr¨ªa un tiro en la cabeza. S¨®lo hubo un superviviente, que se encuentra en estado cr¨ªtico. Entre los fallecidos se hallan el, juez y dos funcionarios municipales.

Liu Pang-yu, de 54 a?os, magistrado de la localidad de Taoyuan (donde se sit¨²a, al sur de Taipei, el principal aeropuerto de la isla) y miembro del gobernante partido Kuomintang, muri¨® en el hospital siete horas despu¨¦s del tiroteo, uno de los cr¨ªmenes m¨¢s espectaculares de la historia de Taiwan. La polic¨ªa local asegura que dos pistoleros entraron en la casa de Liu, ataron las manos de las nueve personas presentes y, de forma sistem¨¢tica, les dispararon en la cabeza a quemarropa. Cinco de ellas murieron instant¨¢neamente y otras tres, en las horas siguientes. No se tiene ninguna informaci¨®n sobre los motivos de los asesinos.El crimen de ayer record¨® a los taiwaneses el perpetrado el 28 de febrero de 1980 y que a¨²n sigue sin resolver: el asesinato, de clara inspiraci¨®n pol¨ªtica, de la madre y las hijas de un l¨ªder independentista encarcelado.

El Ministerio del Interior ofrece una recompensa de 14 millones de pesetas por informaci¨®n que permita resolver el caso. Se ha montado una gigantesca operaci¨®n policial en todo el pa¨ªs que incluye controles en todos los puertos y aeropuertos. La agencia oficial de prensa, sin citar sus fuentes, asegura que, tras la matanza, puede haber un turbio asunto de desarrollo urban¨ªstico. Los investigadores no descartan alguna relaci¨®n con la turbulenta pol¨ªtica taiwanesa, y la radio estatal dice que los asesinos pueden tener relaciones con la delincuencia organizada.

Adem¨¢s de Liu y los dos miembros del consejo municipal, la relaci¨®n de v¨ªctimas incluye a un primo del juez, un conductor, una empleada dom¨¦stica, un secretario y un guardaespaldas.

La oficina del jefe de Estado, Lee Teng-hui, emiti¨® un comunicado en el que se lamenta el suceso y se pide un trabajo policial r¨¢pido. "El presidente est¨¢ muy impresionado", se dec¨ªa en el texto, "y ha ordenado a las diversas agencias oficiales que resuelvan el caso lo antes posible".