La exitosa terapia de Luis Fern¨¢ndez

Bilbao Luis Fern¨¢ndez, un futbolista y luego un entrenador temperamental como pocos, lleg¨® a Bilbao con un term¨®metro en la mano. Lo sac¨® a la calle y el mercurio le indic¨® bajo cero. La experiencia de Stepanovic hab¨ªa deja do al Athletic aterido de fr¨ªo. En tonces Luis Fern¨¢ndez encendi¨® la calefacci¨®n y la catedral recobr¨® la fe. La autoestima fue el fruto de una terapia de grupo. Luis Fern¨¢ndez requer¨ªa mayor personalidad al mismo tiempo que reclamaba humildad, quer¨ªa un equipo alegre, atrevido y un p¨²blico pasional en el campo y racional en casa. El milagro surti¨® efecto. Hoy, el Athletic ha recobrado la estima y la autoestima con un f¨²tbol que raya en la osad¨ªa y resultados casi milagrosos.

Al tarife?o Luis Fern¨¢ndez no le asustaron Bilbao y sus limitaciones. Con m¨²ltiples t¨ªtulos como jugador y el entorchado europeo como entrenador del Paris Saint-Germain, aterriz¨® en Bilbao dispuesto a afrontar un nuevo reto. En Bilbao present¨® sus credenciales. Este t¨¦cnico accidental proclama que su condici¨®n de entrenador se debe a una cuesti¨®n de gratitud con el Cannes, equipo donde jug¨® tras una grave lesi¨®n en la rodilla. Vista la intensidad de su trabajo, no parece probable que nunca quisiera ser entrenador, si acaso porque en Cannes le aflor¨® un sentimiento reprimido. El reto de Bilbao demuestra su condici¨®n de ganador.

Su entrada en San Mam¨¦s result¨® estruendosa. Primero gole¨® a la Real Sociedad resta?ando una herida social, pero al d¨ªa siguiente encaj¨® id¨¦ntica goleada con el Real Madrid. El comienzo del campeonato puso a San Mam¨¦s con el coraz¨®n en la garganta. Su sistema defensivo se resquebrajaba y el equipo encajaba goles con la misma facilidad que los obten¨ªa. M¨¢s de uno pens¨® que aquellos fundamentos no aguantar¨ªan cuatro partidos.

Pero Luis Fern¨¢ndez conect¨® y traspas¨® su alegr¨ªa a la grada: el f¨²tbol suele ser condescendiente con los osados. Frente al Rayo, el Athletic se qued¨® con 10 jugadores y perdiendo el partido el t¨¦cnico aline¨® uno tras otro a tres nuevos delanteros, se volvi¨® a la grada y reclam¨® el clamor del p¨²blico. Ese d¨ªa el Athletic gan¨® el partido y algo m¨¢s: la reuni¨®n del equipo y el p¨²blico, dos partes que viv¨ªan un divorcio de a?os. La debilidad defensiva no quebr¨® sus planes. Paciencia, aprendizaje y experiencia fueron los tres elementos que combin¨® junto a intervenciones explosivas. Hoy, frente al Bar?a, se presenta como un equipo s¨®lido, seguidor de la fe de su t¨¦cnico y obsesionado como por el gol. Quiz¨¢ el aspecto que m¨¢s le preocupa sea la euforia. Le gusta ese clima previo, pero lo lamenta cuando se refiere a la clasificaci¨®n. Entonces vuelve a sacar el term¨®metro y si observa que el mercurio sube en exceso arroja el suficiente fr¨ªo para recobrar la calma.

Luis Fern¨¢ndez sue?a con ser el primero que este a?o le gane al Barcelona. Para despu¨¦s guardar el sue?o de devolver alg¨²n t¨ªtulo a las virtrinas rojiblancas. Para m¨¢s tarde aspirar a entrenar a la selecci¨®n francesa. En los tres casos lo ha declarado p¨²blicamente. Tres emociones fuertes sin misterio alguno. Mientras tanto, ha imbuido al p¨²blico bilba¨ªno del reconocimiento a sus futbolistas. Hace unos d¨ªas declar¨® en L'Equipe que "jugadores como Guerrero y Urrutia romper¨ªan el campeonato franc¨¦s". Le¨ªdo en Bilbao, la adrenalina de San Mam¨¦s ha subido enteros.