El l¨ªder de los rebeldes zaire?os califica de "est¨²pida" la ayuda a¨¦rea

Laurent Kabila, el l¨ªder de los banyamulenges (tutsis zaire?os), reiter¨® ayer -en lo que ¨¦l llama "museo de la represi¨®n", el lujos¨ªsimo palacio en Goma del presidente de Zaire, Mobutu Sese Seko- su oposici¨®n a una intervenci¨®n multinacional en el este de Zaire. "El lanzamiento de ayuda humanitaria en paraca¨ªdas es una idea est¨²pida", afirma. Kabila pone tres condiciones a la operaci¨®n aprobada en Canad¨¢: que sea informado de cada misi¨®n a¨¦rea, que ¨¦stas tengan sentido y que no se utilicen para alimentar a sus enemigos, los interhamwes (la milicia hutu responsable del genocidio de un mill¨®n de tutsis y hutus moderados en Ruanda).

Laurent Kabila, vestido de marr¨®n, sin la gorra de Marbella que con tanta frecuencia calza -"?Vaya propaganda que os estoy haciendo!", dijo a este enviado especial-, asegur¨® que aceptar¨¢ como m¨¢ximo a cinco soldados extranjeros en su territorio para que ¨¦stos puedan guiar los aviones. "Estamos dispuestos a cooperar, si el mundo est¨¢ dispuesto a cooperar con nosotros. Desde el principio hemos dejado claro que no aceptamos tropas extranjeras terrestres. No es algo que se pueda discutir. Ya no hay grandes concentraciones de refugiados. Las cifras que se han difundido por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y algunas de las ONG son una ficci¨®n, un pretexto para tratar de asistir al gobernante Mobutu de este pa¨ªs. Este baile de cifras tiene una clara motivaci¨®n pol¨ªtica. El problema de los refugiados en este ¨¢rea ha terminado".Kabila habla pausado, despacio, al menos cuando se expresa en ingl¨¦s. Medita cada frase. Casi no mueve las manos. Mira a los ojos a su interlocutor. Domina la escena. ?sta no es su primera revoluci¨®n. Fue aliado del Che Guevara y de Patricio Lumumba. En la rueda de prensa celebrada ayer en Goma s¨®lo para media docena de medios internacionales, entre ellos EL PA?S, dej¨® claras algunas de sus intenciones.

Kabila rechaz¨® las acusaciones de que sus tropas est¨¦n cometiendo excesos en el sur, en el ¨¢rea de Bukavu. "Eso es un montaje de la BBC", dijo. "No matamos refugiados, no matamos a nuestra propia gente". El l¨ªder de la rebeli¨®n banyamulenge dijo sin eufemismos que sus hombres no hacen prisioneros entre los interhamwes. "Son gente que no se rinde; muere matando. Hasta ahora s¨®lo hemos capturado unos pocos. (...)No se los entregamos al Gobierno ruand¨¦s". En otro momento afirm¨® algo que contradice la realidad: "No tenemos contactos con el Gobierno de Ruanda".

"Ustedes, sus Gobiernos, deber¨ªan damos las gracias por lo que hemos hecho, liberar a los refugiados de los asesinos. Estaban ustedes dispuestos a enviar 5.000 soldados aqu¨ª. Hubiera habido lucha con los interhamwes. Hubiera habido muertos. El dinero de sus contribuyentes estar¨ªa mejor empleado en dar de comer a los refugiados. ?Por qu¨¦ lanzar la comida en paraca¨ªdas desde el aire si aqu¨ª tenemos carreteras?" .

Ayuda exterior

Los interhamwes y soldados del derrotado Ej¨¦rcito hutu se han refugiado en Wali Kali, al norte de Goma. "Sabemos que est¨¢n all¨ª", dice Kabila. "No para iniciar una contraofensiva, sino porque es un importante nudo de comunicaciones". Seg¨²n el l¨ªder de los banyamulenges, los interhawmes "no tienen ni la voluntad ni la moral para lanzar un ataque. Debemos pensar bien qu¨¦ es lo que queremos hacer, si conviene tomarla o esperar. La gente que sale de Wali Kali nos pide que ataquemos. Denuncian pillajes, asesinatos y violaciones. Tambi¨¦n hemos detectado hace dos d¨ªas un grupo importante de interhamwes en las monta?as de la cordillera de Virunga. No sabemos si tratan de alcanzar Ruanda o est¨¢n escondidos".El l¨ªder banyamulenge niega haber recibido ayuda exterior. "Somos muy pobres. Nadie nos socorre. Ni las organizaciones humanitarias que s¨®lo se fijan en Ruanda y en los refugiados". Kabila explic¨® que una de sus fuentes de financiaci¨®n es la mina de oro que han arrebatado al Gobierno de Kinshasa. "De esa mina se sacaban dos veces por semana sacas de oro para la cuenta de Mobutu en Suiza. Ahora la controlamos nosotros".

Kabila pide ayuda a la comunidad internacional para poder reconstruir la econom¨ªa de Kivu y alimentar a su gente. Pero no quiere que esa ayuda suponga cesi¨®n de soberan¨ªa. "Hemos liberado este territorio con la sangre de nuestra gente, de nuestros soldados, y no lo vamos a entregar". Los banyamulenges no desean romper la unidad de Zaire. "Lo que queremos es un Gobierno de transici¨®n, democracia y elecciones. Y que este pa¨ªs se llame de nuevo Congo. ?Qu¨¦ significa eso de Zaire? Nadie sabe lo que es. Hay que regresar a nuestros or¨ªgenes".

[El Ministerio de Defensa canadiense anunci¨® anoche que el cuartel general de la fuerza multinacional ha sido transferido de Entebe a Kampala, la capital de Uganda, por "razones log¨ªsticas", informa France Presse].