Duelo por los suelos

Dos razones para el duelo. La primera, el fallecimiento de Oscar Molina, ex jugador del Real Madrid B que jug¨® una temporada cedido en el Legan¨¦s. La segunda, la defunci¨®n del f¨²tbol alegre y vistoso que el equipo de S¨¢nchez Duque acostumbraba a practicar. La crisis est¨¢ aqu¨ª, cuesta sacar adelante los partidos en casa y el equipo ya no genera sue?os de primera entre su afici¨®n.Dos razones para hablar de un duelo por los suelos. La primera, que el nivel del f¨²tbol exhibido alcanz¨® cotas subierr¨¢neas: patadones, trompicones, agarrones, cabezazos, mucha fuerza y poco ingenio. La segunda, las continuas interrupciones del juego como consecuencia de las faltas. Y en este apartado, Alfredo, el organizador del juego del Lega, se las llev¨® todas. El Toledo ten¨ªa claro c¨®mo neutralizar los avances pepineros y no se anduvo con chiquitas. Que Alfredo se busque un buen detergente, que las manchas de barro a veces se resisten.

Y eso que el partido no comenz¨® con mala pinta. A los seis minutos, el codiciado Mois¨¦s estrellaba, un bal¨®n en el larguero a pase de Vidal, y la hinchada se frotaba las manos. En vano. El resto de la primera parte ofreci¨® como balance el que ser¨ªa el ¨²nico disparo a puerta de todo el partido del Toledo.

La responsabilidad de un partido tan penoso hay que endos¨¢rsela en gran parte al r¨¢cano equipo confeccionado por Emiilio Cruz, un entrenador que apost¨® por una alineaci¨®n ultradefensiva. El Legan¨¦s se dej¨® contagiar y no supo contraponer creatividad ante tanto derroche del mal llamado f¨²tbol de fuerza.

El tono no cambi¨® en la segunda parte. Tambi¨¦n se generaron expectativas en los primeros compases con la internada de Villoria, que superaba a Villalvilla para acabar perdiendo el bal¨®n, s¨®lo ante la porter¨ªa. Pero no hubo m¨¢s. Muchos balones a la olla, constantes fueras de juego, y Alfredo, por los suelos.