Compa?eros de generaci¨®n y de viaje

"De los ochenta no queda nada en Madrid, todo se ha esfumado". Lo afirmaba la semana pasada Jaime Urrutia, el cantante de Gabinete Caligari. Caminaba de la barcelonesa sala Bikini al estudio donde Susana, la novia de Loquillo, le esperaba en un plat¨® para preguntarle por alguna an¨¦cdota de su relaci¨®n con el rockero. Urrutia era uno de los invitados que el Loco hab¨ªa convocado para grabar en directo Compa?eros de Viaje, su nuevo disco. Junto a Carlos Segarra, Dani Nel.lo, Ramonc¨ªn, Gabriel Sopefia, Pepe Risi, Aurelio y Los Trogloditas, Loquillo convirti¨® a Barcelona durante tres d¨ªas en la capital de los ochenta.

"Somos como los restos del naufragio", dec¨ªa el Loco en la sala Bikini. Y seguramente lo dec¨ªa porque ya tiene una edad en la que gusta reconocerse en la propia edad, formando parte de una generaci¨®n que adem¨¢s lo fue todo en la m¨²sica de este pa¨ªs. Esperaba que los t¨¦cnicos preparasen la grabaci¨®n del siguiente tema. Se grababa el disco sin la presencia de un p¨²blico, pero a pesar de ello el Loco estaba muy elegante.A prop¨®sito de los inconvenientes de la elegancia, Gay, su manager, hab¨ªa contado una an¨¦cdota a Susana pocos minutos antes: "Est¨¢bamos en la antesala de un juzgado a punto de declarar. De repente, un zapato del Loco empez¨® a encogerse de manera alarmante. Uno de sus gatos debi¨® mearse, en ¨¦l y su fin¨ªsima piel francesa empezaba a acusarlo. 'Gay, no puedo entrar as¨ª donde el juez', me dijo. As¨ª que yo comparec¨ª ante la autoridad elegant¨ªsimo, pero con un solo zapato. El Loco y yo calzamos el mismo pie".

V¨ªdeo dom¨¦stico

Programa completo. El lunes ha b¨ªan llegado todos los invitados y hab¨ªan ensayado en un local. El martes se grababa y el mi¨¦rcoles se actuaba complet¨¢ndose la grabaci¨®n. Antes, el martes, ha b¨ªa que contarle a una c¨¢mara an¨¦cdotas y hacerse la foto de fa milia. "No quiero que os bes¨¦is, sino, que cont¨¦is piques", vocea ba Oscar Aibar, director del filme Atolladero y responsable del v¨ªdeo dom¨¦stico que se editar¨¢ .del concierto; "Pues la verdad, la primera vez que vi al Loco me pareci¨® un gilipollas, un est¨²pido. Me cay¨® fatal", dijo Dani Nel.lo cogiendo al vuelo las palabras de Oscar. Por su parte, Gabriel Sope?a opt¨® por la met¨¢fora: "Es como un pura sangre: puede ganar o puede perder, pero cuando corre lo da todo".Esa era la cara de Loquillo al d¨ªa siguiente, actuando frente a sus admiradores. Cuando no cantaba, ten¨ªa la mirada inyectada en sangre, una mirada marcada por la tensi¨®n. Estaba tenso, como un pura sangre disfrutando de la carrera. Se sent¨ªa el rey, un rey homenajeado por el p¨²blico y por los personajes a los que ¨¦l hab¨ªa tendido la mano. De todos ellos, Ramonc¨ªn fue el que m¨¢s impresionado se mostr¨® al salir a escena para cantar Al l¨ªmite con el Loco. Su cara evidenci¨® el placer de volver a pisar un escenario y recibir unos v¨ªtores que quiz¨¢s hace mucho tiempo no hab¨ªa o¨ªdo. Ya se sabe que en los plat¨®s de televisi¨®n todo est¨¢ enlatado. En Bikini eran aplausos reales, aplausos de una Barcelona rendida a lo m¨¢s castizo de, Madrid: Jaime Urrutia, Pepe Risi y el mism¨ªsimo y macarra ex-Rey del Pollo Frito.