La perra del embajador y la radio del nip¨®n

Gran alborozo caus¨® en la opini¨®n p¨²blica nacional y extranjera la liberaci¨®n de Enma, la perra del embajador japon¨¦s. Despu¨¦s del penoso cautiverio sufrido a manos de Cerpa Cartolini y sus secuaces, la pobre bestia fue reanimada ayer por el cuerpo de bomberos y Cruz Roja Internacional y conducida a un lugar seguro.Enma es una pastora alemana que parec¨ªa ratera del Tercer Mundo cuando. fue salvada de la inanici¨®n por los equipos de rescate que la observaron vagando al pairo en los jardines de la residencia bajo asedio.

El estado f¨ªsico del animal es calamitoso; est¨¢ deshidratada, hambrienta y con un foco de sarna en el lomo. Pero m¨¢s preocupantes. son los previsibles trastornos emocionales sufridos, ya que su compa?ero muri¨® durante el intenso intercambio de disparos entre la polic¨ªa y los secuestradores, el d¨ªa del asalto. Adem¨¢s, fuentes generalmente bien informadas aseguran que, contrariamente a la versi¨®n oficial, no fue un gato el que d¨ªas atr¨¢s salt¨® por los aires al pisar una mina, sino un cachorro de Enma.

Los periodistas se conmovieron al verla aparecer con la Cruz Roja, revel¨® un testigo. Portada en los informativos escritos y audiovisuales, Enma avanzaba a trancas y barrancas, se ca¨ªa y decidi¨® no hablar ni responder a los requerimientos de la citada prensa, ¨¢vida de sus reacciones tras el inhumano secuestro.

Otro emotivo episodio, el lado humano de la noticia, se meti¨® tambi¨¦n en los titulares y enterneci¨® a quienes de ¨¦l tuvieron conocimiento. Esta fue la noticia: el taxista C¨¦sar Gonz¨¢lez devolvi¨® el radiotransmisor olvidado por un periodista japon¨¦s. "Esta honradez me la inculcaron mis padres", resumi¨® C¨¦sar, adscrito desde ahora a la cuadra de ch¨®feres del nip¨®n. "Creo que lo m¨¢s normal es devolver lo ajeno", asombr¨® este caballero del asfalto.