El desahogo de los muchachotes

Sindicato del Crimen, Def Con DosLa segunda noche de Actual 97 estuvo consagrada a uno de los grandes paradigmas sonoros de los a?os noventa: no tiene un nombre aceptado comunmente pero es el solapamiento entre el heavy metal y el punk rock con el funk o el hip hop. Y logr¨® una buena entrada para desarrollarse en una noche g¨¦lida en la que las voces de la cordura recomendaban no sacar el coche. Pero Logro?o forma parte, en t¨¦rminos est¨¦ticos, de la Zona Norte y all¨ª domina la dureza musical entre el p¨²blico del rock.El cartel resultaba prometedor ya que juntaba a pioneros del hip hop madrile?o (Sindicato del Crimen) con triunfadores del h¨ªbrido arriba mencionado (Def Con Dos). Astuto emparejamiento. Periferia proletaria -el Sindicato tiene su base en Valdemoro- contra bohemia de Malasa?a. En m¨¢s de una ocasi¨®n se ha hablado de plagio de conceptos entre ambos grupos pero en La Rioja la sangre no lleg¨® al r¨ªo: no hubo confraternizaci¨®n pero tampoco enfrentamiento.

Sindicato del Crimen ha evolucionado desde sus inicios como los duros de la primera oleada del hip hop nacional: pueden usar el soniquete del rap y ensamblar sampleados, pero ahora se trata de un grupo de rock. Ruido y furia es la propuesta del sexteto en su segundo disco, Que aproveche, que constituy¨® el n¨²cleo de su repertorio. Desdichadamente esas letras que son manifiestos de un rechazo visceral o cr¨®nicas de pesadillas se perd¨ªan en un recinto cavernoso que nunca se plante¨® acoger a la m¨²sica entre sus paredes. As¨ª que nos quedamos sin saber si la aparici¨®n final del monstruo de l¨¢tex y el lanzamiento de patas de pollo implicaban alg¨²n mensaje milenarista.

Def Con Dos sufri¨® id¨¦nticas zancadillas ambientales pero sus frases lapidarias se han difundido m¨¢s y los oyentes pod¨ªan insertar mentalmente lo que se extraviaba entre rebotes sonoros y volumen brutal. Tanto poder¨ªo les permite incluso prescindir en alg¨²n momento de los instrumentos y dedicarse a rapear sobre las partes pregrabadas. Siempre atentos a la actualidad, sumaron el nombre de Juan Antonio Canta a su lista de "odiados m¨¢rtires del rock".

De hecho, Def Con Dos goza de tal predicamento entre su tribu que no se corta un pelo: el grupo ofreci¨® un recital completo, casi 30 temas incluyendo las dos tandas de bises. Con lo que lleg¨® un momento en que no se sab¨ªa si la jaqueca era producto del machaqueo implacable o del fr¨ªo del recinto. Pero el n¨²cleo que agitaba melenas, que brincaba incansable y se lanzaba sobre las cabezas de sus correligionarios no parec¨ªa sentir ninguna dolencia. Hoy, como ayer, el rock sirve para descargar adrenalina e insultar a la bestia. Cualquiera que sea la bestia.