Espa?a, Italia y Portugal, unicos pa¨ªses de la UE que no han conseguido frenar el sida

Espa?a lleva a?os ocupando el primer puesto en Europa en incidencia de sida. Es, adem¨¢s, junto a Italia y Portugal, uno de los tres ¨²nicos pa¨ªses de la UE donde aument¨® el n¨²mero de casos en 1996, seg¨²n un informe aprobado ayer en Bruselas por Comisi¨®n Europea. El pasado a?o los 15 pa¨ªses registraron 17.778 nuevos casos frente a los 22.383 de 1995, lo que, a juicio de las autoridades comunitarias, significa una estabilizaci¨®n de la epidemia. El consumo de drogas inyectables es el culpable del 47% de todas la infecciones, especialmente en estos tres pa¨ªses.

La Comisi¨®n Europea advierte en su informe que, mientras a nivel global se ha conseguido frenar el crecimiento imparable del sida en la ¨²ltima d¨¦cada, la progresi¨®n de la epidemia no ha seguido la misma tendencia en Espa?a, Italia y Portugal, donde su incidencia es "particularmente alta", se?ala este organismo.La causa se?alada por el informe reside en la alta incidencia de sida que se registra entre los consumidores de drogas por v¨ªa intravenosa en estos tres pa¨ªses.

Espa?a ten¨ªa acumulados el a?o pasado 41.598 casos de sida, de los cuales ha fallecido ya un 52,4%. La tasa de infecci¨®n, la m¨¢s alta de Europa, es de 173,6 pacientes por mill¨®n de habitantes, seg¨²n la UE. Los adictos a las drogas constituyen un 65% de todos los enfermos.

Rechazo ideol¨®gico

El argumento, reconocido por la Administraci¨®n sanitaria s¨®lo desde hace poco tiempo, es el retraso de Espa?a en el desarrollo de programas de reducci¨®n del da?o, como el intercambio de jeringuillas entre la poblaci¨®n drogadicta y la dispensaci¨®n de metadona como sustitutivo oral de la hero¨ªna.En la actualidad se admite vagamente que hubo cierto rechazo ideol¨®gico de los propios pol¨ªticos espa?oles a estas medidas, que los pa¨ªses europeos empezaron a poner en pr¨¢ctica hacia 1985, apenas cuatro a?os despu¨¦s de irrumpir la epidemia y estigmatizaci¨®n social del drogadicto sin pensar en las consecuencias para la sociedad en general. La metadona empieza a introducirse en programas espec¨ªficos carcelarios, instituciones especialmente castigadas en Espa?a por la infecci¨®n de sida. Esta sustancia, de uso oral, evita que los adictos se intercambien jeringuillas infectadas al inyectarse hero¨ªna.

Con todo, los ¨²ltimos datos oficiales hace dos meses permit¨ªan albergar cierto optimismo sobre el desarrollo de la epidemia. Entre enero y septiembre de 1996 se hab¨ªan notificado 2.802 casos nuevos, frente a los 7.000 y 6.000 de cada uno de los dos a?os anteriores. Las autoridades sanitarias calculan que, adem¨¢s, hay entre 150.000 y 200.000 seropositivos, personas infectadas por el virus aunque sin enfermedad declarada.

Desde el inicio de la epidemia en la d¨¦cada de los 80 se han detectado en los pa¨ªses de la UE un total de 167.021 casos, el 47% de los cuales est¨¢ asociado al consumo de drogas inyectables. Desde 1990, los drogadictos son la poblaci¨®n m¨¢s afectada por el sida, desplazando en incidencia a los contagiados por v¨ªa sexual.

Transmisi¨®n heterosexual

Durante 1995, el 43% de los casos registrados en la UE correspondi¨® a adictos a drogas; un 28% por relaciones homosexuales y un 19% por contacto heterosexual. Este ¨²ltimo es otro fen¨®meno nuevo que se ha expresado con fuerza en los ¨²ltimos 10 a?os: la transmisi¨®n heterosexual del virus, lo que ha incrementado el n¨²mero de mujeres infectadas, del 12% en 1986 al 20% en 1995. Bien es cierto que un 43% de las que resultaron contagiadas ten¨ªan una pareja drogadicta.Entre 1994 y 1995, la UE ha aprobado 134 proyectos de cooperaci¨®n transnacional para luchar contra esta enfermedad y ha invertido en ello 21 millones de d¨®lares (2.730 millones de pesetas).