Un pa¨ªs dominado por la corrupci¨®n
, La recepci¨®n ofrecida en el Palacio de Gobierno a la ecuatoriana Lorena Bobitt, c¨¦lebre por cortar el pene a su marido en EE UU, no hubiera pasado de ser una ocurrencia del populista Abdal¨¢ Bucaram de no venir precedida por una corrupci¨®n desmesurada de su Gobierno, el nepotismo en los nombramientos p¨²blicos y un ajuste econ¨®mico a palo seco que se hizo intolerable. Comportamientos personales, impropios de la jefatura del Estado, ambiciones opositoras insatisfechas y, sobre todo, el violento y masivo alzamiento de una poblaci¨®n enfurecida por el aumento de precios disparata dos determinaron el naufragio del Gobierno y una crisis sin precedentes en la historia de este pa¨ªs de 11 millones de habitantes.Investido presidente el 10 de agosto del pasado a?o, Abdal¨¢ Bucaram instruy¨® a sus diputados en el Partido Roldosista ecuatoriano para que no tomaran iniciativas parlamentarias encaminadas a llenar el vac¨ªo constitucional observado en la Carta Magna respecto a la sustituci¨®n del presidente en casos de fuerza mayor.
Desde 1946 y concretamente en los a?os 1947, 1961 y 1981, los vicepresidentes sucedieron a los presidentes. Enmiendas posteriores llevaron al vac¨ªo invocado ahora como uno de los responsables del caos. La orden de Bucaram, seg¨²n dice el periodista Sim¨®n Espinoza, de la revista Vistazo, nac¨ªa de su temor a una supuesta querencia conspirativa de la vicepresidenta, Rosal¨ªa Arteaga, que el viernes se autoproclam¨® presidenta cuando el Congreso destituy¨® a Bucaram y tom¨® juramento como presidente interino al titular de la C¨¢mara Javier Alarc¨®n.
Bucaram asumi¨® el Gobierno advirtiendo que emplear¨ªa la mano dura. As¨ª lo hizo, pero en provecho propio fundamentalmente. Incorpor¨® al Gabinete a uno de sus hermanos y a otros parientes, una veintena de ellos ocupan cargos consulares y copan la Administraci¨®n miles de roldosistas.
La diplomacia y las personas competentes de la Administraci¨®n de Abdal¨¢ Bucaram sufren el deterioro de la imagen nacional y los abusos de las pol¨ªticas gubernativas. El soborno en las aduanas, las comisiones superiores al 10% en los contratos del Estado, la venta de plazas, las arbitrariedades de un presidente bailando la samba o insultando, acabaron hartando, y la oposici¨®n vente¨® la oportunidad de descabalgarle si lograba agruparse.
Para poner en orden las cuentas macroecon¨®micas y abrir el pa¨ªs a la inversi¨®n extranjera, Bucaram contrat¨® al ex ministro de Econom¨ªa argentino Domingo Cavallo, destacada figura del neoliberalismo y ejecutor del plan de convertibilidad gaucho, que estableci¨® la paridad entre el d¨®lar y el peso que abati¨® la hiperinflaci¨®n. La eliminaci¨®n de subsidios en art¨ªculos de primera necesidad, las subidas en las tarifas del agua, del gas o el transporte y el alza de precios de casi 1.000% con salarios muy bajos sublevaron a la poblaci¨®n, porque Argentina no es Ecuador.
. La mayor¨ªa de sus habitantes sufren pobreza y paro, y los limitados recursos del Estado no pueden soportar las consecuencias de un ajuste que se ejecut¨® con gran torpeza y desorden.
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