El catedr¨¢tico Perez-Bustamante pide responsabilidades por investigarle
, El catedr¨¢tico de Derecho de la Universidad Complutense de Madrid, Rogelio P¨¦rez Bustamante, exige responsabilidades a quienes decidieron abrirle una investigaci¨®n por un supuesto delito de sustraci¨®n de documentos hist¨®ricos. En el despacho del historiador y consejero de Cultura del primer Gobierno c¨¢ntabro de Juan Hormaechea, Rogelio P¨¦rez-Bustamante, de 52 a?os, la polic¨ªa, por orden del Gobierno c¨¢ntabro, hall¨® hace unas semanas unos valiosos documentos hist¨®ricos procedentes del Ayuntamiento de Potes, en el valle de Li¨¦bana. En concreto, unas ordenazas municipales sobre el Traslado de las reformas de la Villa de Potes, de 1460.De la casa consistorial de este municipio tom¨® P¨¦rez-Bustamante hace diez a?os estos documentos, impulsado por su pasi¨®n por ver impresa toda la historia de su regi¨®n. A pesar de que el requerimiento policial se hizo de puntillas, de una manera muy discreta, a P¨¦rez-Bustamante ya le acusan algunos en la universidad de un delito que ¨¦l asegura que nunca cometi¨®. "Me llaman ladr¨®n, pero yo no soy, ning¨²n ladr¨®n. Y no tengo la sensaci¨®n de haber estado en posesi¨®n il¨ªcita de algo. S¨®lo soy un hombre que sufre por publicar. Pero si usted quiere, yo le cuento brevemente todo lo que pas¨®", explica el catedr¨¢tico.
Y comienza a relatar su historia: "Yo no soy un hombre brillante, pero s¨ª soy un gran trabajador. Es cierto que la polic¨ªa encontr¨® esos documentos en mi poder. Todo el mundo sab¨ªa que yo los ten¨ªa, porque toda esa informaci¨®n la he publicado. Los guardaba en mi despacho, pero nunca lo he ocultado. As¨ª que no entiendo por qu¨¦ quieren perseguirme de esa manera".
Las razones que alegan en la Consejer¨ªa de Cultura de Cantabria son claras: el Gobierno c¨¢ntabro ha iniciado una campa?a de recuperaci¨®n del patrimonio de la regi¨®n, con el fin de montar el pr¨®ximo verano una exposici¨®n en el palacete del Embarcadero de Santander-Pero a Rogelio P¨¦rez-Bustamante no le bastan las palabras. Y para dar fe de su buena voluntad acaba de donar su biblioteca privada, valorada en 15 millones de pesetas, al Ayuntamiento c¨¢ntabro de Reoc¨ªn. Con amargura contin¨²a haciendo memoria: "Yo quise triunfar en mi tierra y hasta tener una estatua, y ahora me pagan con esto. Me siento humillado, porque el da?o a mi persona ya est¨¢ hecho". El catedr¨¢tico ha pedido responsabilidades a la Consejer¨ªa de Cultura de Cantabria y al decano de la facultad de Derecho de la Complutense, Jos¨¦ Iturmendi. "Alguien ha violado mi intimidad, porque la polic¨ªa sab¨ªa muy bien en qu¨¦ carpetas ten¨ªa yo los documentos. Alguien abri¨® mi mesa y me denunci¨®. Deber¨ªan indemnizarme por todo el da?o que me han hecho", explica.
Antes de concluir, el catedr¨¢tico amenaza con emprender acciones legales: "No soy rico, no tengo nada, pero voy a tomar todo tipo de acciones jur¨ªdicas, penales y civiles en defensa de mi honor, frente a la desidia, la maldad y la envidia".
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