Clamor un¨¢nime

Parece mentira que haya pasado un a?o desde la imp¨ªa victoria electoral del PP y que todav¨ªa la Reina Mercedes siga aguardando en El Escorial el cumplimiento de una vieja deuda, privados como est¨¢n sus restos de descansar definitivamente en la catedral de la Almudena. Como recuerda con puntualidad y reiteraci¨®n -ansoniana el Abc, Madrid est¨¢ en deuda con la Reina Mercedes. Hora es ya de insistir en que la catedral fue construida por iniciativa del Rey don Alfonso XII de quien Mercedes fue primera esposa. Cierto que las obras sufrieron una larga paralizaci¨®n y que ni durante el dilatado y ben¨¦fico reinado de su hijo don Alfonso XIII, ni durante la Rep¨²blica del fango, sangre y l¨¢grimas, ni en la resistencia del "no pasar¨¢n", ni despu¨¦s en los apenas 40 a?os de nacional catolicismo franquista, hubo tiempo ni ocasi¨®n de concluirlas. Por eso, la caballerosidad de Anson se ha probado, una vez m¨¢s, cuando su pulso certero no ha temblado a la hora de hacer justicia y resaltar el tributo de continuidad a la historia de Espa?a que supo prestar el anterior presidente del Gobierno, el socialista Felipe Gonz¨¢lez, quien otorg¨® la debida prioridad a la Conclusi¨®n de una catedral al fin inaugurada durante su visita pastoral a Madrid por Juan Pablo II, el Pont¨ªfice felizmente reinante.Por eso, al j¨²bilo popular detectado en las calles cuando se supo que el mausoleo se encontraba cuidadosamente proyectado por un Men¨¦ndez Pidal arquitecto, sucedi¨® un estremecimiento de perplejidad del vecindario porque, de modo inexplicable, a¨²n falta un acuerdo para construir el monumento funerario y fijar su emplazamiento. Todo queda pendiente, se nos dice, de la diligencia de cuantos deben intervenir en la operaci¨®n para que se encuentre la r¨¢pida soluci¨®n y se cumpla la inaplazable voluntad de don Alfonso XII. Pero, si para la construcci¨®n de cualquier paso subterr¨¢neo el alcalde de la Villa, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano, ha sabido establecer los cinco turnos de trabajo ininterumpido, si a la piqueta de Villoria no le han valido restos arqueol¨®gicos, casas del Tesoro ni exedras de Sabatini para proseguir incansable las obras de la Plaza de Oriente, si Madrid soporta con estoicismo la ampliaci¨®n del metro en m¨¢s de 30 kil¨®metros, si en la presidencia de la Comunidad Aut¨®noma se encuentra una figura del PP del calibre de Alberto Ruiz Gallard¨®n, cualquier excusa o pretexto de dilaci¨®n que se aduzca, incluida la convergencia de Maastricht, quedar¨¢ invalidada de antemano. Y desde ya, bancos y Cajas de ahorro deber¨ªan habilitar cuentas corrientes para el dep¨®sito de los ¨®bolos que personas de todas las clases sociales se precipitar¨¢n a entregar en respuesta a la suscripci¨®n popular que a buen seguro se convocar¨¢ desde todos los peri¨®dicos, salvadas penosas excepciones de los rencorosos de siempre.

Pero abandonemos las piedras. Los triunfalistas de la cat¨¢strofe hubieran preferido impedirlo, pero vuelve "la flor del almendro", vuelve a re¨ªr la primavera, que ni siquiera falt¨® a su cita en los a?os en que no se pod¨ªa escribir de pol¨ªtica en los peri¨®dicos. Afirmaci¨®n algo excesiva porque al menos los adictos al Movimiento dispon¨ªan de 50 diarios, de cientos de emisoras, de la agencia Pyresa y de otros instrumentos adicionales afinados en la pr¨¢ctica, del halago al gran caim¨¢n, tan aposentado en El Pardo como imposible de facturar para Barranquilla, mientras sus huestes se daban a la pr¨¢ctica del bien retribuido deporte de injuriar a la Monarqu¨ªa, a la Dinast¨ªa y a su Titular, a quien nunca se concedi¨® derecho de r¨¦plica. Aquello pas¨®, y las p¨¢ginas de Abc se ennoblecieron reconociendo el talento all¨ª donde se encontraba, sin atender a ideolog¨ªas ni aposentamientos previos. ?Qui¨¦n ha llegado m¨¢s lejos en la exaltaci¨®n de Neruda o de Alberti? Pero, en todo caso, con Televisa en el horizonte, procede a atender a la copla mexicana transcrita por Adolfo Bioy Casares en su ¨²ltimo libro De jardines ajenos (Tusquets editores): "Qu¨¦ bonito est¨¢ Macario /En su caballo jovero. /Nunca robaba a los pobres, /Antes les daba dinero. /Que bonito era Macario /En su caballo retinto. /El digital en la mano, /Peleando con treinticinco.

?Qu¨¦ importa que Alberti mereciera el Premio Lenin? ?Por qu¨¦ volver sobre aquellas coplas de Jaime Manrique a la muerte de la Reina Victoria? Desoigamos a Jos¨¦ Antonio Gir¨®n de Velasco cuando propugnaba con voz de mando: "!Alinearse con los muertos!". Aqu¨ª se ha pasado p¨¢gina y todos est¨¢n convocados, como se nos acaba de repetir en ?vila, a la ilusionante tarea de Espa?a. S¨®lo los obsesos pueden acordarse de los art¨ªculos que con la firma, de Almendros se publicaron en el diario El Alc¨¢zar los d¨ªas 17 de diciembre de 1980, 22 de enero y 1 de f¨¢bero de 1981, antes de escuchar la voz que les dice: "Amigos, os comunico con alborozo que ayer han florecido los almendros".