La hora de Zamora

EL INTENTO de implicar al presidente del Gobierno en la trama de supuesta financiaci¨®n ilegal del PP (entonces AP) de Castilla y Le¨®n a mediados de los ochenta ha hecho reaccionar a la direcci¨®n de ese partido, que anuncia querellas contra el denunciante y una investigaci¨®n a fondo en Zamora, cuna del esc¨¢ndalo. El propio Aznar considera "poco serio",que se le pregunte sobre el asunto, pero su actitud y la de su partido cuando estaba en la oposici¨®n se vuelve ahora contra ¨¦l. Por lo dem¨¢s, es posible que el esc¨¢ndalo incida en el debate sobre la reforma de la ley de financiaci¨®n de los partidos, en la que el PP quiere que sean legales las donaciones an¨®nimas de empresas.El presidente de la Diputaci¨®n de Zamora, Antol¨ªn Mart¨ªn, suspendido de militancia en el PP tras una serie de batallas internas, ha acusado al que todav¨ªa es su partido de haberse financiado entre 1983 y 1991 mediante el cobro de comisiones ilegales y otras pr¨¢cticas corruptas. El denunciante ha hecho entrega al fiscal de la Audiencia Provincial de documentos que respaldar¨ªan sus acusaciones. Entre ellos, el testimonio grabado de un empresario, Eduardo Corrales, que explica el modus operandi de los altos cargos de la diputaci¨®n supuestamente encargados de cobrar las fuertes sumas exigidas a los constructores.

La falta de fiabilidad de ese empresario, incurso, junto con otras 13 personas, en una querella por estafa, es el principal argumento del PP local para negar veracidad a la denuncia. Sin embargo, el hecho de que entre las personas implicadas figure un ex vicepresidente de la diputaci¨®n, Casto Lorenzo, se?alado como el hombre clave de la supuesta trama de financiaci¨®n irregular, complica el panorama. Adem¨¢s, el propio Casto Lorenzo hizo hace a?o y medio una denuncia -que no ratific¨® ante el juez- en t¨¦minos similares a los que ahora aparecen. Por otra parte, Antol¨ªn Mart¨ªn, veterano militante del PP -fue alcalde de su capital-, asegura que el motivo de su ca¨ªda en desgracia fue su intento de cortar con "el tr¨¢fico de maletines", en alusi¨®n al cobro de comisiones por adjudicaciones de obras p¨²blicas.

Una de las revelaciones incluidas en el material entregado al fiscal se refiere a la recaudaci¨®n y pago en 1987 de una fuerte suma -20 millones de pesetas- a un diputado provincial del PSOE por cambiar su voto a favor del candidato del PP a la presidencia de la diputaci¨®n, impidiendo que fuera elegido el pactado entre el PSOE y el CDS, que ten¨ªan mayor¨ªa. La direcci¨®n local del PP neg¨® entonces tajantemente la compra del voto, y aunque nadie dudaba de la identidad del Bellido Dolfos del caso, no pudo probarse la existencia de un pago. El supuesto traidor, un tal Jos¨¦ Luis Antorrena, dirigi¨® una carta a EL PA?S negando la acusaci¨®n en t¨¦rminos barrocos, y se pas¨® al grupo mixto, desapareciendo de Zamora alg¨²n tiempo despu¨¦s.

La direcci¨®n local del PP se limit¨® en un primer momento a acusar a Antol¨ªn Mart¨ªn de actuar por venganza o resentimiento, y ahora acusa de lo mismo al constructor Corrales. Seguramente es cierto que s¨®lo las rivalidades internas explican que las acusaciones que circulaban en voz baja. hayan aflorado con estr¨¦pito. Pero no habr¨ªa de qu¨¦ extra?arse: siempre fue as¨ª -recu¨¦rdese Filesa- , y es dif¨ªcil que ocurra de otra manera. Pero que los denunciantes sean o hayan sido conocedores o c¨®mplices de lo denunciado no resta credibilidad a su denuncia. M¨¢s bien al rev¨¦s.

Carece de sentido, por tanto, el aire de dama ofendida con que la direcci¨®n del PP ha pretendido dar el asunto por inexistente,

primero, y por ya zanjado, m¨¢s tarde, con el encargo de una investigaci¨®n interna. Ya hubo una investigaci¨®n interna en relaci¨®n al asunto Naseiro, cuyo ¨²nico objetivo fue exculpar a los dirigentes del PP que aparec¨ªan expresamente citados, en las conversaciones entre los encargados de recaudar el dinero. Y todos pudimos o¨ªr aquellas grabaciones, por mucho que el procedimiento judicial fuera archivado por problemas de procedimiento. Incluso si el empresario ahora denunciante resulta poco de fiar, las referencias que proporciona son perfectamente verificables. Por ejemplo: ?hubo o no compra de voto del tr¨¢nsfuga que pas¨® de ganar 65.000 pesetas a disponer de una cuenta corriente de 12 millones? En Zamora hay mucho que investigar, y si no es ¨¦ste un caso para la fiscal¨ªa anticorrupci¨®n, ?cu¨¢l lo ser¨ªa?