Concierto
Fueron llegando los diputados al Congreso para el Pleno en que se iba a debatir el estado de la naci¨®n. Acababan de suceder en el pa¨ªs algunos hechos muy graves que hab¨ªan alarmado a la opini¨®n p¨²blica y la histeria de los medios de comunicaci¨®n era consecuencia de la electricidad de la calle, que a su vez se hab¨ªa condensado en el ambiente del hemiciclo antes de comenzar la sesi¨®n. Corr¨ªan rumores de toda ¨ªndole. Todos coincid¨ªan en que se estaba tramando algo terrible y nadie sab¨ªa de qu¨¦ lado podr¨ªa llegar la soluci¨®n, dado el nivel de agresividad que hab¨ªan alcanzado los debates parlamentarios. Para esa tarde se esperaba que la violencia llegara al l¨ªmite. Tal vez por eso muy pocos diputados advirtieron que las estenotipistas que trabajan en medio del hemiciclo hab¨ªan desaparecido, y all¨ª, en lugar de su mesa, hab¨ªa un atril con. una partitura y un violonchelo apoyado en una silla. A causa de la tensi¨®n del momento nadie coment¨® ese cambio mientras sus se?or¨ªas iban ocupando los esca?os. Tampoco el presidente del Congreso se refiri¨® a ello cuando abri¨® la sesi¨®n. Los insultos entre los grupos parla mentarios comenzaron en seguida. Unos y otros se arrojaban a la cabeza toda clase de asesina tos, cohechos y latrocinios. Cada una de las soflamas iba acompa?ada de gritos y abucheos en los tendidos que imped¨ªan al orador de turno explayarse en las miserias de sus adversarios. Cuando la confusi¨®n era absoluta, en me dio de un pateo general, por la misma puerta que un d¨ªa penetr¨® el golpista Tejero, ahora entr¨® d¨¦ repente el gran m¨²sico Rostrop¨®vich, no armado con pistola, sino con el arco del violonchelo, y con suma elegancia se dirigi¨® al centro del hemiciclo y una vez all¨ª dio con el arco unos golpes suaves en el borde del atril y ex clam¨® con autoridad: ?Al suelo, todos al suelo! El Gobierno y los diputados, sin una sola excepci¨®n se derrumbaron a plomo bajo los esca?os. Sobre el panorama vac¨ªo del Congreso, Rostropo¨®vich comenz¨® a interpretar la Suite n¨²mero 1 para violonchelo de J. S. Bach.
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