El desconcierto sobrevuela el futuro de Barajas

El futuro aeroportuario de Madrid lleva diez a?os empantanado. Los socialistas encargaron un ambicioso estudio en 1987 para convertir la base a¨¦rea de Getafe en el segundo gran aeropuerto de la regi¨®n. Eran tiempos en los que el ruido no parec¨ªa importar y los alcaldes miraban al cielo rogando que les cayera un aeropuerto para enriquecer sus municipios. As¨ª estaba Pedro Castro, alcalde socialista que todav¨ªa contin¨²a con el bast¨®n de mando en Getafe. Pero el plan no cuaj¨® y el gozo de Castro acab¨® en la papelera.Los t¨¦cnicos consideraron in viable aquella idea y optaron por la alternativa del Gran Barajas, un ¨²nico aeropuerto con cinco pistas. Presentaron el documento en 19901 y estallaron las protestas. Los ecologistas y los muncipios pr¨®ximos al aeropuerto pelearon contra el proyecto, y tres a?os despu¨¦s consiguieron un ¨¦xito parcial: los socialistas aceptaron hacer s¨®lo una pista m¨¢s en Barajas, y no tres como propon¨ªan sus expertos, para atender el futuro crecimiento de la demanda de. transporte a¨¦reo en Madrid. En la declaraci¨®n de impacto ambiental qued¨® plasmado el compromiso de estudiar el emplazamiento de un nuevo aeropuerto en un lugar alejado de Barajas.

El Gobierno de Aznar hered¨® aquel proyecto, que asumi¨® sin reticencias. El ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado, adjudic¨® las obras de la tercera pista en diciembre de 1996, el mes m¨¢s negro en la historia de Barajas -el aeropuerto sufri¨® una de sus peores rachas, con un accidente que ocasion¨® su cierre durante cinco horas y con numerosas demoras en los vuelos-. En los presupuestos de 1997 se reserv¨® una parte de los 1000 millones consignados para los estudios t¨¦cnicos sobre la viabilidad de un nuevo aeropuerto en Madrid.

Con estos antecedentes, el orgaismo competente, Aeropuertos Nacionales y Navegaci¨®n A¨¦rea (AENA), solicit¨® al Ayuntamiento de Madrid que retirara de su Plan General de Ordenaci¨®n Urbana la reserva de 817 hect¨¢reas junto al aeropuerto para la cuarta y quinta pistas de Barajas.

El gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano, atendi¨® sin problemas aquella solicitud, presentada en forma de alegaci¨®n al Plan General. Los t¨¦cnicos cogieron la goma de borrar y eliminaron la reserva aeroportuaria de Barajas en diciembre de 1996. Con ese ¨²ltimo retoque de su nuevo Plan General, que define el futuro urban¨ªstico de la ciudad para los pr¨®ximos doce a?os, ?lvarez del Manzano envi¨® el documento a la Comunidad de Madrid para su aprobaci¨®n definitiva. En los planos que llegaron a la Consejer¨ªa de Obras P¨²blicas hab¨ªa desaparecido el terreno reservado a la cuarta y quinta pistas.

Durante dos meses, nadie dijo nada sobre este retoque. Pero el presidente de Iberia comenz¨® a presionar para evitar la construcci¨®n de un nuevo aeropuerto por las negativas consecuencias que podr¨ªa tener para la cuenta de resultados de la compa?¨ªa, seg¨²n han asegurado a EL PA?S dirigentes regionales y municipales. El alcalde, partidario de ampliar Barajas, acept¨® las reclamaciones de Iberia. Las hizo suyas y encarg¨® al concejal de Urbanismo, Ignacio del R¨ªo, rectificar de urgencia para devolver a las 817 hect¨¢reas pr¨®ximas a Barajas la categor¨ªa de reserva aeroportuario para una ampliaci¨®n futura.

El 28 de febrero de 1997, el pleno del Ayuntamiento aprob¨® un punto aparentemente menor, denominado "correcci¨®n de errores del nuevo Plan General". En el lote de las 388 erratas subsanadas se inclu¨ªa una, justamente la ¨²ltima, que afectaba a las 817 hect¨¢reas de reserva aeroportuar¨ªa que se hab¨ªan eliminado del Plan General para convertirse en suelo no urbanizable com¨²n (en ¨¦l, seg¨²n las normas, se pueden establecer instalaciones agropecuarias, explotaciones mineras, carreteras...).

Del R¨ªo, a toda prisa, incluy¨® una palabra en la calificaci¨®n de este suelo: "Vinculado al sistema aeroportuario". Suficiente para devolver a ese espacio de la ciudad la posibilidad de albergar en un futuro la cuarta y quinta pistas de Barajas. Pero el Gobierno de Alberto Ruiz-Gallard¨®n ha decidido aprobar el Plan General de Madrid antes del pr¨®ximo 24 de abril sin incluir esta correcci¨®n, que estudiar¨¢ m¨¢s adelante. Tampoco aseguran los dirigentes auton¨®micos que se apruebe, pues los t¨¦cnicos de Obras P¨²blicas consideran que no es una simple errata, sino una modificaci¨®n de fondo, que permite construir determinadas instalaciones en una gran extensi¨®n de suelo.

Si finalmente se rechaza esta correcci¨®n de errores y se mantienen los planos del Plan General sin la reserva aeroportuaria, el Ayuntamiento deber¨¢ esperar al menos un a?o para poder hacer el cambio. Para conseguirlo tendr¨¢ que proponer a la Comunidad de Madrid una modificaci¨®n concreta.

Durante ese a?o, los propietarios de terrenos junto a Barajas podr¨ªan construir en ¨¦l todas las instalaciones permitidas en el ep¨ªgrafe que las normas urban¨ªsticas reservan al suelo no urbanizable com¨²n. Si esto ocurre, la cuarta, y la quinta pistas pueden considerarse definitivamente perdidas para Barajas.

AENA prefiere que la Comunidad apruebe la reserva aeroportuaria para poder estudiar todas las posibilidades de Madrid sin que despu¨¦s haya alg¨²n problema de falta de espacio. Que AENA apoye la reserva aeroportuar¨ªa no significa que apueste decididamente por la ampliaci¨®n de Barajas que propone el alcalde.

Carlos de Andr¨¦s, director general de AENA, traslada sensatez a este problema: "Vamos a estudiar todas las posibilidades, pero para hacerlo debemos tener garantizadas las reservas de suelo necesarias, por- eso es preciso mantener la previsi¨®n de la ampliaci¨®n de Barajas". Aunque AENA pidi¨® en un principio la retirada de la reserva aeroportuar¨ªa por "cuestiones administrativas" que De Andr¨¦s no precisa "acababa de llegar un equipo nuevo a AENA", explica agradece ahora que el Ayuntamiento haya devuelto a esos terrenos su categor¨ªa aeroportuaria.

"A partir de ahora, empezaremos a estudiar todas las alternativas, y cu¨¢ndo tengamos una propuesta, la discutiremos con los municipios afectados y con las distintas administraciones. Despu¨¦s, Fomento decidir¨¢", anuncia De Andr¨¦s. Estudios sobr¨¦ las necesidades aeroportuarias no han faltado en los ¨²ltimos tiempos.

La Agencia de Aviaci¨®n de Estados Unidos, el m¨¢s prestigioso organismo consultivo del mundo, estudi¨® el problema por encargo del Ministerio de Transporte, y propuso en 1990 una alternativa: ampliar Barajas hasta cuatro pistas. Este organismo consider¨® que hacer un nuevo aeropuerto ser¨ªa "mucho m¨¢s caro que ampliar Barajas y traer¨ªa consigo enormes implicaciones de tipo pol¨ªtico, social, de uso del suelo, accesos, desarrollo de infraestructuras y del ¨¢rea metropolitana".

Tambi¨¦n apunt¨® este prestigioso organismo un posible inconveniente en Barajas que el tiempo, ha venido a confirmar: "Si la alternativa de ampliar Barajas se pone en tela de juicio por cuestiones sociales, pol¨ªticas, medioambientales y otras razones, puede. ser necesario proponer la construcci¨®n de un nuevo aeropuerto". Dieron en el clavo.

El Ministerio de Transportes acept¨® el criterio norteamericano y traz¨® un plan 90 que apostaba por las cuatro pistas.

Aquella vieja idea, enterrada tras las protestas ecologistas y vecinales, regresa ahora con fuerza, empujada por el alcalde, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano, y empujada por la compa?¨ªa Iberia, la C¨¢mara de Comercio de Madrid y otras personalidades.

Sin embargo, algunas dudas han empezado a aterrizar sobre el Gran Barajas. Son ¨¦stas:

- ?Existe espacio a¨¦reo suficiente para abrir dos nuevas pistas en Barajas?

- "Con la apertura de la tercera pista, ahora en construcci¨®n, revisaremos todo el esquema a¨¦reo actual de Barajas, porque los aviones van a despegar m¨¢s al norte. Si se abrieran dos pistas m¨¢s no habr¨ªa problemas de espacio a¨¦reo", explica el director general de AENA, Carlos de Andr¨¦s.

- ?Se incrementar¨¢n las molestias por ruidos y afectar¨¢n a mayor n¨²mero de municipios y vecinos?

- "No es proporcional el aumento de pistas con el aumento de la poblaci¨®n y los municipios afectados. Si Barajas tuviera cincopistas, el impacto ac¨²stico sobre los n¨²cleos urbanos pr¨®ximos no variar¨ªa sustancialmente", se?ala De Andr¨¦s.

- La ministra de Medio Ambiente se comprometi¨® con los alcaldes de la zona a que la tercera pista ser¨ªa la ¨²ltima de Barajas por sus problemas medioambientales. ?Este compromiso invalida cualquier alternativa que pase por la construcci¨®n de la cuarta y la quinta pistas?

- "Es evidente que la oposici¨®n ciudadana a un proyecto de esta envergadura es importante. Su opini¨®n cuenta, como tambi¨¦n cuenta la opini¨®n de las compa?¨ªas a¨¦reas que, como Iber¨ªa, no quieren desplazarse a un nuevo aeropuerto. Habr¨¢ que poner cada cosa en la balanza antes de tomar una decisi¨®n".

De momento, AENA anda enfrascada en unas obras de cerca de 25.000 millones para abrir, dentro de 18 meses, la tercera pista de Barajas, lo que permitir¨¢ duplicar su capacidad y garantizar una atenci¨®n suficiente durante los pr¨®ximos diez a?os. Con la nueva pista, el aeropuerto de Madrid podr¨¢ cerrar sus ejercicios anuales con el doble de viajeros, y de 20 millones de pasajeros que tiene actualmente podr¨ªa pasar a 40 millones.

La nueva terminal

La nueva terminal que dar¨¢ servicio a la tercera pista se inaugurar¨¢ alg¨²n tiempo despu¨¦s. De momento, seg¨²n el director general de AENA, este departamento tiene previsto adjudicar el proyecto arquitect¨®nico b¨¢sico antes del verano. Posteriormente, se sacar¨¢ el concurso de las obras, que tendr¨¢ un plazo de ejecuci¨®n de 22 meses y un presupuesto de 29.000 millones de pesetas.Hasta la entrada en servicio de la nueva superficie, con cerca de 140.000 metros cuadrados de superficie, AENA tiene previsto dar servicio a la tercera pista con el denominado "dique norte", seg¨²n comenta Carlos de Andr¨¦s.

Los pol¨ªticos han dejado de preocuparse por estas obras, ya encauzadas, para mirar al futuro sin tener claro el camino que van a seguir. Ruiz-Gallard¨®n y Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano tendr¨¢n que coordinar sus vuelos para que el PP no se estrelle en Barajas.