La federaci¨®n designa como sede de la final de Copa el Bernab¨¦u

La federaci¨®n convenci¨® ayer a los representantes del Barca y del Betis para que jueguen la final de la Copa del Rey, el pr¨®ximo 28 de junio a las 21.00 horas en Madrid, en el campo del Santiago Bernab¨¦u. El Bar?a insinu¨® su escenario preferido (Valencia), e inmediatamente tuvo la r¨¦plica del Betis: M¨¢laga. Al final, el dinero -una recaudaci¨®n m¨¢s elevada por el mayor aforo del campo madridista- y la firmeza federativa, de hecho innegociable en apoyo del Bernab¨¦u, lograron el acuerdo de los dos equipos finalistas.

La Federaci¨®n reuni¨® ayer en su sede a representantes de los dos equipos finalistas (Manuel Ruiz de Lopera, presidente del Betis, y Ricard Maxenchs, secretario general del Bar?a) para consensuar el escenario que hab¨ªa elegido para la final de Copa, el campo del Real Madrid. "Quer¨ªamos jugar lo m¨¢s cerca posible de Barcelona y por eso propusimos Valencia o Zaragoza", fue la excusa de Maxenchs para no admitir que el club azulgrana hab¨ªa puesto pegas al campo madridista porque lo considera "hostil".

"La Federaci¨®n ha propuesto el Bernab¨¦u y el Betis y el Barcelona lo han visto al final l¨®gico por la capacidad del campo madridista y por la distancia equidistante de las ciudades de los dos clubes", fue la justificaci¨®n de Ruiz de Lopera. "Es normal", a?adi¨® el presidente b¨¦tico, "que nos hayamos inclinado por la idea de la Federaci¨®n porque si el Barcelona quiere jugar la final en Valencia, nosotros decimos que en M¨¢laga. Al Barcelona no le interesa ir a M¨¢laga, ni al Betis a Valencia. La Federaci¨®n ha decidido y nos ha convencido. Al Betis le encanta Madrid. El Betis se siente madrile?o".

500 millones de ingresos

El Barcelona y el Betis, junto con la Federaci¨®n y el Real Madrid, se repartir¨¢n casi 500 millones de pesetas, cifra estimada de ingresos por todos los conceptos. El cargo en taquilla de las 82.000 localidades que se pondr¨¢n a la venta -sus precios van de las 2.000, las m¨¢s baratas, a las 6.000, las m¨¢s caras- se aproxima a los 300 millones de pesetas, a los que hay que a?adir 150 millones por derechos de televisi¨®n, y, el resto, por la publicidad est¨¢tica y explotaci¨®n comercial.Otro de los puntos acordados por los finalistas es el reparto de las entradas, unas 35.000 para cada equipo. Las localidades restantes ser¨¢n destinadas a la Federaci¨®n, para venta y compromisos oficiales. El aforo del Bernab¨¦u se ha rebajado para la final en unas 10.000 localidades, en su gran mayor¨ªa de pie. A los seguidores del Bar?a les ha correspondido ubicarse en el fondo norte del campo, y en el fondo sur, a los del Betis.

Tanto el Barca como la Federaci¨®n no pusieron impedimento alguno a uno de los caprichos de Lopera: utilizar el vestuario del Madrid. "Queremos defender el dormitorio del Madrid", fue el pretexto del due?o del Betis. Lo que ya no pudo conseguir Lopera es saltarse el reglamento y que su equipo fuese el local. El Barcelona no renunci¨® a ese derecho, que le otorga su antig¨¹edad.