Los Quince amenazan a Iran, pero reenvian a sus embajadores a Teheran

La Uni¨®n Europea combin¨® ayer el palo y la zanahoria para intentar castigar al r¨¦gimen integrista isl¨¢mico de Ir¨¢n. Por un lado, aprob¨® una dura resoluci¨®n de condena a Teher¨¢n en la que mantiene congelado el di¨¢logo cr¨ªtico con ese pa¨ªs, suspende el intercambio de visitas oficiales a nivel ministerial y se conjura para expulsar de la Uni¨®n a cualquier esp¨ªa que se infiltre entre el personal iran¨ª de sus representaciones en Europa. Pero por otro, decidi¨® devolver a Teher¨¢n a sus embajadores -llamados a consultas hace cuatro semanas- y se neg¨® a adoptar represalias comerciales, una opci¨®n planteada por el Reino Unido y que s¨®lo tuvo el t¨ªmido apoyo de Luxemburgo.A juicio del secretario de Estado de Relaciones Exteriores, Ram¨®n. de Miguel, eso s¨®lo servir¨ªa "para hacerle el juego a los radicales isl¨¢micos". "Hablando con un pa¨ªs se gana m¨¢s que aisl¨¢ndolo. La Uni¨®n Europea no condena al ostracismo total a los pa¨ªses con los que no coincide", a?adi¨®. El ministro franc¨¦s, Herv¨¦ de Charette, tuvo palabras gemelas: "Conseguiremos m¨¢s por el di¨¢logo y la convicci¨®n que por el silencio".

La decisi¨®n europea tuvo al menos la virtud de haber arrancado la unanimidad sin grandes problemas. Se trataba de mostrar su solidaridad con Alemania, pa¨ªs detonante de la crisis al sentenciar su justicia que el Gobierno de Ir¨¢n estaba detr¨¢s del atentado mortal contra varios opositores iran¨ªes en territorio alem¨¢n. Se trataba, al mismo tiempo, de no perjudicar los intereses comerciales de esa misma Alemania, principal socio comercial de Ir¨¢n en Europa. Se trataba, en fin, de lanzar una advertencia sin cerrarse ninguna puerta.

[Ir¨¢n hizo saber a trav¨¦s de la radio oficial que no se ver¨ªa afectado por la medida porque man tiene estrechas relaciones con muchos pa¨ªses fuera de Europa, informa Reuter. Estados Unidos, por su parte, mostr¨® su satisfacci¨®n por la decisi¨®n europea, si bien "habr¨ªa preferido que, se incluyesen las sanciones econ¨®micas", seg¨²n anunci¨® el portavoz del Departamento de Estado, Nicholas Burns].