El Mallorqu¨ªn, condenado a 23 a?os por el crimen de Costa Polvoranca.

Los hechos, seg¨²n la sentencia, comenzaron poco antes de la tres de la madrugada frente al pub Donqui de Costa Polvoranca. "Se entabl¨® una discusi¨®n" entre el portero de este local y El Chema, de una parte, y Ricardo Rodr¨ªguez, la v¨ªctima, de otra. Las razones: "La enemistad" entre e grupo de j¨®venes que se identifica como bakaladeros y el de punkis. Cada grupo con su "indumentaria caracter¨ªstica". La v¨ªctima se acerc¨® al bar Donqui y grit¨®: "Nazis de mierda, os voy a matar". Los otros le llamaron "guarro". La tensi¨®n creci¨® y salieron del bar El Mallorqu¨ªn y dos de los acusados. Ricardo roci¨® a sus agresores con un pulverizador. A ambos grupos se unieron mas j¨®venes, aunque en mayor n¨²mero en el de los bakaladeros, encabezado por El Mallorqu¨ªn. Este asest¨® "una profunda" cuchillada en el coraz¨®n a Ricardo, y luego otra, en la nalga ("para deshonrarle"), a Ra¨²l Tomillo, amigo de la v¨ªctima.En el seno de la Asociaci¨®n J¨®venes contra la Intolerancia, personada en el juicio como acusaci¨®n particular, las cinco absoluciones han causado "desesperanza e inquietud", declar¨® ayer Esteban Ibarra, portavoz de esta asociaci¨®n. Ibarra tach¨® el fallo "de extremadamente ben¨¦volo", anunci¨® un recurso ante el Tribunal Supremo y, paralelamente, reflexion¨®: "?Qu¨¦ va a pasar ahora cuando un grupo de personas agreda a alguien y resulte di

acreditar qu¨¦ golpes concretos da cada uno?". La sentencia, apostill¨®, "es una bombona de ox¨ªgeno para los violentos". A Juan Mar¨ªa Bandr¨¦s, abogado de la familia de Ricardo, tambi¨¦n le sorprendieron las cinco absoluciones. "Hay una pu?alada en el coraz¨®n, pero tambi¨¦n hay 21 golpes y patadas en el cuerpo de la v¨ªctima, y est¨¢ claro que los acusados estaban all¨ª".

El tribunal entiende que, ciertamente, "intervinieron" m¨¢s personas en la agresi¨®n, pero advierte que "su identidad no est¨¢ acreditada". Con una excepci¨®n, la de Alberto Villar, El Chema, que golpe¨® la cabeza de la v¨ªctima con una pistola de perdigones cuando se encontraba en el suelo.

En el despacho de Javier Saavedra, abogado de cuatro de los siete procesados, se respiraba ayer euforia por la proximidad del fallo con los alegatos defensivos: "S¨®lo han condenado a uno de mis clientes [El Mallorqu¨ªn], y, a mi juicio, por un error, ya que no hay pruebas de que ¨¦l sea el autor del homicidio. Por eso", agreg¨® Saavedra, "vamos a recurrir la sentencia". El letrado record¨® que la acusaci¨®n particular "ped¨ªa 56 a?os de c¨¢rcel" para El Mallorqu¨ªn "por un asesinato alevoso".

El tribunal, la Secci¨®n Primera de la Audiencia Provincial, ordena en la sentencia que se investigue por falso testimonio a nueve testigos, la mayor¨ªa amigos de los procesados. Y que El Mallorqu¨ªn indemnice con 25 millones de pesetas a la familia de Ricardo Rodr¨ªguez. No obstante, como se trata de una persona insolvente, no tendr¨¢ que pagarla.

La supuesta ideolog¨ªa de agresores (neonazis) y v¨ªctimas (punkis) y la salvaje muerte de una persona en una absurda ri?a ha convertido el juicio por el crimen de Costa Polvoranca en un hecho de gran trascendencia p¨²blica. La Audiencia s¨®lo atribuye a El Mallorqu¨ªn su "pertenencia a un grupo violento", pero sin citar su denominaci¨®n. El jefe de la Brigada de Tribus Urbanas de la Polic¨ªa Judicial s¨ª lo facilit¨®: el grup¨²sculo Bases Aut¨®nomas, secci¨®n de la plaza de Cubos. La polic¨ªa tambi¨¦n involucr¨® en este grup¨²sculo a dos amigos de El Mallorqu¨ªn ahora absueltos: al entonces menor Antonio B. y a F¨¦lix Chaves. El tribunal considera "err¨®nea" la apreciaci¨®n policial, no acreditada en el juicio. No obstante, advierte que su misi¨®n "no es juzgar la ideolog¨ªa" de los acusados.

El Mallorqu¨ªn es el ¨²nico que permanece en la c¨¢rcel en relaci¨®n con el crimen de Ricardo. Lleva as¨ª casi dos a?os. Y si su comportamiento carcelario es correcto, "estar¨¢ otros seis o siete anos, no m¨¢s", asever¨® ayer su abogado. Se le condena a un total de 23 a?os de c¨¢rcel, pero el antiguo C¨®digo Penal, el aplicado en este caso, establece la redenci¨®n de penas por buen comportamiento y trabajos dentro del presidio (un d¨ªa menos de c¨¢rcel por cada dos de trabajo) y establece la libertad condicional cuando se cumplen las tres cuartas partes de la condena.

El 'caso Arganda'

A El Mallorqu¨ªn se le ha condenado a 18 a?os de c¨¢rcel por un delito de homicidio (la muerte Ricardo) y a otros cinco m¨¢s por el navajazo en la nalga a Ra¨²l Tomillo. En esta sentencia, seg¨²n el tribunal, concurre la agravante de abuso de superioridad (el n¨²mero de agresores era mucho mayor). Otra sala de la Audiencia tambi¨¦n conden¨® recientemente por homicidio a Miguel ?ngel Castellanos, principal acusado del crimen de Arganda. Pisote¨® la cabeza de David Mart¨ªn. Castellanos fue condenado a 10 a?os de c¨¢rcel. La diferencia de penas se debe, entre otras cosas, a que Castellanos era menor de edad en el momento del crimen.