La policia peruana ofrece diez millones por el ¨²ltimo l¨ªder del MRTA
"?Protege nuestra patria! ?Denuncia al terrorismo!". Solucionada al asalto la crisis de los rehenes, la Polic¨ªa Nacional de Per¨² ofrece 10 millones de pesetas por la cabeza del ¨²ltimo jefe en libertad del Mov¨ªmiento Revolucionario Tupac Amaru (MRTA). "Si proporcionas alg¨²n dato que nos lleve a la captura de Hugo Avellaneda Valdez ser¨¢s recompensado de forma an¨®mina", promete la requisitoria publicada este fin de semana en la prensa local. "Y si est¨¢s en prisi¨®n, adem¨¢s de la recompensa recibir¨¢s el indulto".
Buena parte de los peruanos celebr¨® el desenlace de la operaci¨®n militar contra el MRTA como un doble ¨¦xito: fueron liberados los rehenes y resultaron muertos los 14 miembros del comando secuestrador. Las encuestas premiaron inmediatamente al presidente, Alberto Fujimori, que afronta dos desaf¨ªos antiguos: reducir la pobreza y el autoritarismo. Que considere oportuno atender el segundo es poco probable.Aunque el asalto del 22 de abril puso fin a cuatro meses y cinco d¨ªas de zozobra, y fue agradecido por el primer ministro japon¨¦s, Ryutaro Hashimoto, en una visita rel¨¢mpago a Lima, persisten las causas econ¨®micas y sociales que dan lugar a la violencia de grupos como el MRTA. "Esta es la verdadera lecci¨®n que deber¨ªa extraer el pa¨ªs y sobre todo quienes manejan y orientan las grandes decisiones", dice el analista Antonio Romero. Los logros registrados con la privatizaci¨®n de empresas p¨²blicas y las reformas emprendidas por Fujimori son tan evidentes como alarmantes sus costes: 700.000 despedidos en seis a?os, y enquistamiento de ¨ªndices de pobreza o miseria que castigan desde hace siglos a casi la mitad de los 24 millones de peruanos. Aunque el pa¨ªs recuper¨® el cr¨¦dito internacional, la servidumbre de una deuda externa superior a los 20.000 millones de d¨®lares es agobiante, engulle la parte del le¨®n de los capitales ingresados, y contribuye a la irritaci¨®n de los m¨¢s necesitados, que viven y no perciben los beneficios del din¨¢mico crecimiento macroecon¨®mico.
El polit¨®logo Hugo Ad¨¢n advierte que si el autoritarismo del presidente arrecia y los excluidos de la econom¨ªa se dan la mano con los excluidos de la pol¨ªtica "ese d¨ªa habr¨¢ acabado la revoluci¨®n neolibera". "Muchos estar¨¢n en camino", prosigue, "de otra revoluci¨®n, in¨¦dita quiz¨¢, luchando y cantando con c¨®lera la vieja canci¨®n que ped¨ªa a Dios que d¨¦ vuelta a la tortilla y los pobres coman pan". La deseada convergencia entre el Gobierno y la fragmentada oposici¨®n para abordar los problemas nacionales m¨¢s urgentes no se da. Al contrario, se acent¨²a la arremetida oficial contra la discrepancia.
"El Estado peruano es en estos momentos un campo de batalla en el que las fuerzas del Gobierno intentan reducir los ¨²ltimos bastiones que no controlan", admite Jaime de Althaus, comentarista del Expreso, diario generalmente proclive a las tesis del Ejecutivo.
Pero el respaldo a Fujimori, incluso en los momentos m¨¢s dif¨ªciles y abusivos de su mandato, es todav¨ªa alto. Las barbaridades del terrorismo de Sendero Luminoso fueron tantas, y la hiperinflaci¨®n del anterior Gobierno desquici¨® de tal manera que la estabilidad monetaria y el patad¨®n del 5 de abril de 1992 al Estado de derecho fueron jaleados como liberadores y a¨²n reportan dividendos a Fujimori.
[Fujimori fue intervenido quir¨²rgicamente en la boca en el Instituto Nacional de Enfermedades Neopl¨¢sicas, especializada en el tratamiento contra el c¨¢ncer, seg¨²n inform¨® a primera hora de la madrugada de hoy, hora espa?ola, la Secretar¨ªa de Prensa de la Presidencia de la Rep¨²blica, que indic¨® que su evoluci¨®n era satisfactoria, informa la agencia Efe].
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