La oposici¨®n portuguesa acusa al Gobierno de "vac¨ªo de poder"

Las acusaciones de una amplia mayor¨ªa de la oposici¨®n sobre la ausencia de gobierno" en Portugal han provocado la elaboraci¨®n de un exhaustivo balance sobre la gesti¨®n del Ejecutivo que preside el socialista Antonio Guterres. El Gobierno sostiene que ha mejorado notablemente la situaci¨®n econ¨®mica del pa¨ªs, destaca su evidente modernizaci¨®n y defiende como un gran ¨¦xito su probable integraci¨®n en el pelot¨®n de cabeza del curo. La oposici¨®n insiste en el "vac¨ªo de poder".A Ojos de la oposici¨®n, los socialistas han frenado y, en algunos casos, paralizado sus principales promesas electorales como la regionalizaci¨®n o las grandes reformas de la Administraci¨®n (salud, finanzas locales y r¨¦gimen fiscal).

El secretario de Estado adjunto al primer ministro, Joaquim Pina Moura, sostiene que la estrategia del Gobierno" se ha orientado hacia tres dimensiones esenciales: "Colocar a Portugal en el centro de la nueva Uni¨®n Europea, crear un Estado moderno y resolver una ecuaci¨®n de tres inc¨®gnitas: asegurar la competitividad de las empresas, crear empleo y controlar la inflaci¨®n sin descuidar la solidaridad social".

El primer ministro, Antonio Guterres, asegura que la revisi¨®n constitucional ser¨¢ aprobada antes del verano, la regionalizaci¨®n no ser¨¢ aplazada y a lo largo de este ano ser¨¢n puestas en marcha las reformas estructurales. Sin embargo, las nuevas promesas de Guterres, a?o y medio despu¨¦s de llegar al poder, no convencen a una oposici¨®n que duda seriamente de la palabra de su primer ministro. El portavoz del Grupo Parlamentario Socialdem¨®crata, Luis Marques Mendes, considera que el Ejecutivo no ha adoptado ninguna medida importante. A juicio de Marques Mendes, el Ejecutivo socialista ni siquiera "est¨¢ defendiendo bien los intereses de Portugal en el plano europeo; est¨¢ agravando las injusticias sociales y ha permitido la degradaci¨®n de la autoridad del Estado", especialmente en seguridad ciudadana.