Barcelona 2004, en el ¨¢mbito de la paz

La iniciativa del alcalde de Barcelona de impulsar un encuentro mundial de culturas para el a?o 2004, en donde se reflexionar¨ªa y se discutir¨ªa lo que nos une y separa a los pueblos, y que analizar¨ªa el papel de la cultura para construir puentes de paz, es sin duda una propuesta interesante, puesto que s¨®lo a trav¨¦s de la cultura y la educaci¨®n tienen remedio muchas din¨¢micas conflictivas. Un acontecimiento de estas caracter¨ªsticas ha de permitir, sin duda alguna, abrir ventanas para proyectos de alcance universal, pero tambi¨¦n para que se potencien iniciativas m¨¢s modestas y pr¨®ximas a la ciudadan¨ªa, igualmente efectivas y necesarias. Es m¨¢s, sin esa primera prueba de lo cercano, posiblemente no ser¨¢ posible construir con seriedad objetivos m¨¢s ambiciosos. Ah¨ª van, por tanto, algunas primeras sugerencias sobre qu¨¦ hacer en nuestro entorno m¨¢s inmediato.Una biblioteca b¨¢sica, al alcance del mundo.

Aunque existen multitud de libros sobre paz, conflictos y aspectos internacionales relacionados con el desarme, todav¨ªa es poca la literatura existente en espa?ol, o es de dif¨ªcil acceso por publicarse en canales poco comerciales.

Una contribuci¨®n muy pr¨¢ctica para la comunidad iberoamericana ser¨ªa la edici¨®n de un centenar de libros sobre aspectos conectados con la cultura de paz, a un precio muy asequible y con un buen despliegue publicitario que asegurara su buena distribuci¨®n.

Las ciudades hablan de sus experiencias de paz.

Por todo el mundo hay ciudades que han encarado valientemente la violencia y diferentes tipos de conflictividad existente en su entorno, con iniciativas poco conocidas m¨¢s all¨¢ de su propio territorio. Muchas de estas iniciativas surgen de sectores populares, buscando la participaci¨®n de j¨®venes y otras personas que han vivido o han participado en episodios de gran violencia, con el prop¨®sito de darles protagonismo en la b¨²squeda y la construcci¨®n de una convivencia m¨¢s pac¨ªfica. En Colombia, Guatemala, El Salvador y otros pa¨ªses, hay municipios pioneros en apoyar estas experiencias, que convendr¨ªa publicitar para acercar a los diferentes actores implicados.

En este sentido, ser¨ªa muy ¨²til crear una revista dedicada exclusivamente a conectar experiencias municipales de paz que cada dos a?os pudiese convocar un encuentro internacional sobre este tema.

Los hermanamientos, una diplomacia de paz. Miles de ayuntamientos de todo el mundo han hecho hermanamientos con municipios de otros pa¨ªses, rompiendo las barreras que a veces han puesto sus propios estados. Aunque algunos no han sido ¨²tiles, muchos otros han sido el punto de partida de un acercamiento entre pueblos, culturas y religiones.

Fortalecer y mejorar los hermanamientos municipales podr¨ªa ser uno de los prop¨®sitos de Barcelona 2004, impulsando un congreso de ciudades hermanadas que permitiera detectar los errores cometidos y proponer mejoras en estas iniciativas.

El 'batall¨®n de paz'. Especialmente en Am¨¦rica Latina, muchas personas que en un momento de su vida hicieron uso de las armas para defender sus ideales, despu¨¦s se han desmovilizado y ahora mantienen un compromiso muy activo en la prevenci¨®n y transformaci¨®n de conflictos o en iniciativas populares que se enfrentan a la violencia de las grandes ciudades. Barcelona 2004 podr¨ªa agrupar a estos nuevos batallones de gente comprometida con la paz, poni¨¦ndola en contacto y ayudando a planificar actividades transnacionales.

Ning¨²n municipio sin recursos sobre paz. En todos los municipios, grandes o peque?os, deber¨ªa existir una secci¨®n sobre estos temas en todas las bibliotecas y hemerotecas, empezando evidentemente por la colecci¨®n de libros antes mencionada.

Un centro de reflexi¨®n sobre la paz y la prevenci¨®n de conflictos. Ni en Catalu?a ni en Espa?a existen suficientes centros dotados con recursos para la investigaci¨®n, informaci¨®n y difusi¨®n de temas relacionados con la paz, el desarme y el estudio de los conflictos.

Adem¨¢s de fortalecer las iniciativas ya existentes, ser¨ªa conveniente crear un centro bien dotado, supervisado por el Parlament de Catalunya, y con una dotaci¨®n no inferior a los 100 millones de pesetas anuales. Ese centro ser¨ªa la semilla para iniciativas que construir despu¨¦s del 2004.

Becas para construir la paz. Los municipios podr¨ªan crear un fondo que asegurara que cada a?o un n¨²mero importante de personas pudiesen completar su formaci¨®n acad¨¦mica en temas relacionados con la investigaci¨®n sobre la paz y los conflictos. Los municipios espa?oles podr¨ªan asumir, por ejemplo, el coste de 20 personas al a?o.

Premios de investigaci¨®n sobre cultura de paz.

Cada a?o, y previa convocatoria p¨²blica, los municipios se comprometer¨ªan a otorgar cinco premios de investigaci¨®n sobre estos temas, con una dotaci¨®n de un mill¨®n de pesetas para cada uno de ellos. Los trabajos premiados ser¨ªan publicados en la colecci¨®n comentada anteriormente.

Un espacio discreto y abierto al di¨¢logo, en el que los pueblos o colectivos que se encuentran enfrentados puedan ir a hablar, a negociar o intercambiar ideas. La ciudad de Barcelona podr¨ªa publicitar por todo el mundo su voluntad de poner al servicio de quien lo necesite ese espacio para el di¨¢logo y la reconciliaci¨®n, y asumir¨ªa con generosidad los viajes de algunos encuentros que, por su significaci¨®n, puedan ser vitales para iniciar o fortalecer procesos de paz.

Barcelona, dep¨®sito vivo de la cultura del sur.

Por su privilegiada situaci¨®n en el Mediterr¨¢neo, Barcelona podr¨ªa crear un espacio cultural donde se concentrar¨ªan recursos audiovisuales (pel¨ªculas, v¨ªdeos, m¨²sica, etc¨¦tera) de las culturas del sur. Ser¨ªa un muestrario de la riqueza cultural ahora invisible de los pa¨ªses del sur, y en particular del continente africano. Este espacio tambi¨¦n podr¨ªa invitar, de manera sistem¨¢tica, a artistas de estos pa¨ªses, haciendo de puente cultural entre el Norte y el Sur.