El m¨²sico africano Ayub Ogada cree inevitable la integraci¨®n cultural

LOS GALILEA Su nombre figura en los cr¨¦ditos de Us de Peter Gabriel o en el disco de AfroCelt Sound System. Ayub Ogada actu¨® en Memorias de ?frica y El color p¨²rpura, y colabor¨® en la banda sonora de la pel¨ªcula espa?ola. ?frica. Este moderno trovador de Kenia, que cree inevitable la integraci¨®n de las culturas, act¨²a hoy en Madrid (Caracol) y ma?ana en Ciudad Real (Museo de Hern¨¢n P¨¦rez del Pulgar).

"En Kenia existen m¨¢s de 40 etnias, kiyuyu, masai, karribas... y cada una tiene su propia m¨²sica. B¨¢sicamente siguen la misma tradici¨®n polirr¨ªtmica que se encuentra en todo el continente africano", explica Ayub Cigada. Nacido en Mombasa, en la costa de Kenia, es un luo: "Nuestra m¨²sica es similar a la de los griots de ?frica occidental. Al igual que ellos cantamos alabanzas, plegarias a Dios o historias sobre la vida".Ayub Ogada grab¨® su primer disco, En mana kuoyo, en el sello de Peter Gabriel. "Fue apasionante porque yo era fan del grupo Genesis. Y en los estudios de Real World tuve la oportunidad de conocer a m¨²sicos de todo el mundo. S¨®lo grab¨¦ un ¨¢lbum m¨ªo, pero muchas canciones con personas distintas". Este moderno trovador africano lleg¨® hasta, Gabriel en 1990. "Viv¨ªa en Londres y, un d¨ªa, tocando en el metro, se me acerc¨® alguien que trabajaba en Womad y me invit¨® a participar en uno de sus festivales", cuenta. Tambi¨¦n ha contribuido al disco colectivo A week in Real World y particip¨® en Arcane, curioso encuentro de artistas de cuatro continentes bajo la direcci¨®n de Simon Jeffes, de la Penguin Cafe Orchestra: "Creo que la integraci¨®n cultural es inevitable porque en cualquier pa¨ªs hay gente escuchando m¨²sicas de otros lugares y porque, adem¨¢s, ¨¦sta ya se ha producido. En realidad, las m¨²sicas se han estado influyendo unas a otras durante los ¨²ltimos 200 a?os".

Achaca el inter¨¦s de europeos y americanos por las llamadas 'm¨²sicas del mundo' a que "el progreso tecnol¨®gico y econ¨®mico ha tra¨ªdo consigo frialdad emocional y cierto aislamiento de las personas. Quiz¨¢ crean que escuchar m¨²sicas de otras latitudes les ayudar¨¢ a encontrar sus ra¨ªces". Ogada tiene una visi¨®n privilegiada del asunto puesto que a los seis a?os se instal¨® en Estados Unidos con sus padres. "Si el impacto all¨ª fue tremendo, mayor a¨²n fue regresar luego a Kenia", afirma. "Un shock redescubrir mi cultura y todo aquello que no me hab¨ªan ense?ado en Am¨¦rica. Y, sobre todo, darme cuenta de que los norteamericanos no entend¨ªan absolutamente nada. Descubr¨ª que en las escuelas de Occidente se ignora a los pa¨ªses que no se consideran importantes econ¨®micamente".