Fianzas y objetos desaparecen de juzgados lentos y desorganizados

La desorganizaci¨®n de muchos juzgados y el lento sistema de trabajo motiva la mayor parte de las reclamaciones de indemnizaci¨®n por anormal funcionamiento de la Administraci¨®n de Justicia, informadas favorablemente por el Consejo General del Poder Judicial. He aqu¨ª casos de objetos o fianzas que se pierden o retrasos que perjudican.34 diskettes y una pistola. En 1991 la polic¨ªa registr¨® un despacho, en el que intervino 34 diskettes de ordenador y una pistola y los puso a disposici¨®n de un juzgado de Santander. Cuando tres a?os despu¨¦s se acord¨® su devoluci¨®n, no pudo efectuarse, por ignorarse donde se encontraban. Juan Garc¨ªa Arbiza valora las p¨¦rdidas en un total de 5.315.000 pesetas, que reclama al Ministerio de Justicia.

Incendio en la Audiencia. Jos¨¦ Miguel Mart¨ªnez pide 20 millones de pesetas por los danos y perjuicios materiales y morales sufridos por el retraso de 14 a?os en un proceso penal contra ¨¦l en el que termin¨® siendo absuelto y que le oblig¨® a la presentaci¨®n quincenal en el juzgado. Hubo que reconstruir el sumario por el incendio ocurrido en la Audiencia de Alicante, por falta de vigilancia nocturna.

Tabaco robado esfumado. ?lvaro Morla Garc¨ªa reclama 158.390 pesetas, importe del tabaco que le fue sustra¨ªdo en 1993 de un veh¨ªculo suyo y que fue recuperado por la Guardia Civil, que lo entreg¨® a un juzgado de Le¨®n, en donde se esfum¨®.

739 d¨ªas de c¨¢rcel indebida. Nueve millones de pesetas pide Crist¨®bal S¨¢nchez Girona como indemnizaci¨®n por los 739 d¨ªas de prisi¨®n provisional indebida en un proceso penal en Tarragona en el que finalmente fue absuelto. Solicita 5,9 millones por da?os materiales (8.000 pesetas por cada uno de los 739 d¨ªas indebidos de c¨¢rcel) y el resto, hasta nueve millones, por perjuicios morales.

P¨¦rdida de tres fianzas. ?ngel Marcen Seral reclama las 600.000 pesetas -m¨¢s intereses- que deposit¨® en 1986 en un juzgado de Hospitalet de Llobregat (Barcelona) como fianza por su libertad provisional, y que de modo indebido fueron devueltas a una tercera persona. Igual hace Agust¨ªn Arellano Mollano respecto a las 100.000 pesetas que en 1982 ingres¨® por el mismo motivo en un juzgado de Bergara (Guipuzcoa) y que en 1993. no le devolvieron por no aparecer el resguardo justificativo del ingreso. Tampoco apareci¨® en 1994, en un juzgado de Bilbao, el ingreso de 25.000 pesetas hecho por Ana Mar¨ªa Tasc¨®n Fern¨¢ndez 10 a?os antes, a cambio de la libertad de su marido, por lo que tambi¨¦n reclama.