Patrocinios y derechos audiovisuales

Alberto Ruiz-Gallardon considera que las temporadas del Teatro Real de Madrid, que se inaugura el 11 de octubre con El sombrero de tres picos y La vida breve, de Falla, "tienen que tener un doble dise?o". "Por un lado", dice, "hay que buscar un equilibrio entre las grandes corrientes musicales de creaci¨®n oper¨ªstica: italiana, francesa, alemana y rusa, que deben estar presentes. Por otro, estos cuatro elementos, que han de aparecer de forma equilibrada pero permanente, con t¨ªtulos de repertorio y de referencia que satisfagan la afici¨®n a la ¨®pera, tienen. que servir para introducir la m¨²sica espa?ola, la contempor¨¢nea y aquellos otros t¨ªtulos, que, por obligaci¨®n pedag¨®gica, deben programarse".El presidente de la Comunidad de Madrid, instituci¨®n que participa con un 27,5% en la gesti¨®n del Real -frente al 72,5% del Ministerio de Educaci¨®n y Cultura-, se siente satisfecho con la respuesta no s¨®lo del p¨²blico -"que en muy pocos d¨ªas ha manifestado su extraordinario inter¨¦s en estar presente en lo que va a constituir el acontecimiento m¨¢s importante de los ¨²ltimos a?os en la cultura espa?ola"-, sino tambi¨¦n de los patrocinadores, "Creo que ni los m¨¢s optimistas pensaban que al d¨ªa de hoy pudi¨¦semos contar con m¨¢s de mil millones de pesetas de patrocinio privado para sostener el Real", afirma.

Ruiz-Gallard¨®n insiste en un aspecto que, en- su opini¨®n, deber¨¢ marcar la financiaci¨®n futura del teatro. "Estarnos entrando en un mundo con sistemas de decision nuevos como los canales tem¨¢ticos, que van a suponer una verdadera revoluci¨®n econ¨®mica dentro de los teatros de ¨®pera del mundo", explica. "Y creo que el Real tiene que ponerse a la cabeza de la gesti¨®n y distribuci¨®n de sus derechos audiovisuales. Esto va a ser una fuente de difusi¨®n del producto y de ingresos propios extraordinariamente importante".

Orquesta privada

Una de las cosas por las que Ruiz-Gallard¨®n se siente satisfecho es porque el Real no haya apostado "por un modelo de orquesta de funcionarios, donde la promoci¨®n profesional no depende del rendimiento". La Orquesta Sinf¨®nica de Madrid es una instituci¨®n privada que se autogestiona, y Ruiz-Gallard¨®n opina que el futuro de las orquestas se vincula "a mecanismos propios de calidad, asociadas a las ciudades, porque necesitan. una afici¨®n estable. Creo que el modelo de las orquestas p¨²blicas es un modelo en revisi¨®n en toda Europa".Como aficionado a la m¨²sica, Ruiz-Gallard¨®n es reticente a decir qu¨¦ obras le gustar¨ªa ver programadas. "Afortunadamente, creo que conservo la capacidad de diferenciar cu¨¢l ser¨ªa mi programaci¨®n ideal y cu¨¢l es mi obligaci¨®n como representante en el patonato de la Comunidad de Madrid. Mi obligaci¨®n es crear afici¨®n, hacer una labor docente y de difusi¨®n. Como aficionado, me va a doler cerrar la temporada sin un Wagner y sin un Strauss. Pero estoy convencido de que esto se corregir¨¢ en temporadas futuras".