En la muerte de Miguel Angel Blanco Garrido
No pudo ser, Miguel. Desgraciadamente no hemos podido celebrar tu libertad entre nosotros. A Espa?a entera se nos ha negado ese sue?o; sue?o que nos ha mantenido especialmente unidos, de una manera sincera, solidaria y sin precedentes.Estoy segura de que te sentir¨¢s orgulloso de tu Pa¨ªs Vasco y de sus gentes, del resto de tu pa¨ªs y, c¨®mo no, de tantas y tantas personas que tanto dentro como fuera de nuestras fronteras han intentado que la justicia, el raciocinio y la humanidad ganasen la batalla a la sinraz¨®n. ?No pudo ser! Que sepas que no te vas solo; te llevas un trozo de coraz¨®n afligido de cada uno de nosotros, motivo por el que siempre estar¨¢s aqu¨ª, entre todos los que lloramos tu ausencia.Descansa en paz Miguel
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