Un gran simulador

En 1940, el Ej¨¦rcito franc¨¦s sufre una de las mayores derrotas de su historia a manos del Ej¨¦rcito alem¨¢n. Durante los cuatro a?os que van desde 1940 a 1944, la etapa de la ocupaci¨®n alemana de Francia, la pr¨¢ctica totalidad de la poblaci¨®n colabora con el Gobierno nazi. Finalizada la II Guerra Mundial, se comienza a inventar la gran mentira de la resistencia.El gran inter¨¦s de Un h¨¦roe muy discreto reside en ser una de las primeras pel¨ªculas de ficci¨®n sobre este tema tan espinoso para los franceses, pero tambi¨¦n en estar construida con una gran habilidad y un Personal sentido del humor. Desarrolla con minuciosidad el nacimiento de una mentira peque?a dentro de otra mucho mayor para no s¨®lo exponer ambas, sino gracias a la peque?a llegar a desenmascarar la mayor.

En el confuso ambiente de Par¨ªs en los primeros momentos tras la guerra, un hombre t¨ªmido, dominado por su madre, decide inventarse un, pasado heroico en la resistencia como ¨²nica forma de supervivencia. Sin grandes esfuerzos y ante su propio asombro, su mentira personal fructifica en el ambiente entusiasta de la mentira general tras la victoria y llega a tener un cargo de responsabilidad en e Ej¨¦rcito en la zona de ocupaci¨®n francesa de Alemania.

Esta brillante pel¨ªcula est¨¢ escrita en colaboraci¨®n y dirigida por Jacques Audiard, un ilustre desconocido entre nosotros, pero que goza de una merecida reputaci¨®n en Francia. Hijo del prol¨ªfico guionista y tambi¨¦n realizador Michel Audiard, a pesar de seguir un camino muy parecido al de su padre, su cine nada tiene que ver. Tras una etapa inicial como guionista, debuta como director con Regarde les homme tomber (1994), un interesante policiaco, y tiene un gran ¨¦xito con Un h¨¦roe muy discreto, su segunda pel¨ªcula, ganadora de un premio a su gui¨®n en el Festival de Cannes de 1966.

Apoyado en una s¨®lida estructura narrativa y utilizando con imaginaci¨®n una amplia gama de estilos cinematogr¨¢ficos, Jacques Audiard emplea su personal humor para dibujar a un peculiar antih¨¦roe dentro de un ambiente tan apoyado en la falsedad que cuando se descubre su mentira apenas produce asombro. Sus buenos resultados en gran parte tambi¨¦n se deben al trabajo de Mathieu Kassovitz, otro nombre clave dentro del actual cine franc¨¦s, pero tambi¨¦n desconocido en Espa?a, que demuestra ser mejor actor que realizador.