Rostrop¨®vich se da por entero
El enlosado de la catedral recibi¨® el domingo al gran Mstislav Rostrop¨®vich con la orquesta de RTVE guiada por Peter Magg. Rostrop¨®vich celebra pleno de vida y facultades su 70? aniversario y ha recibido en Espa?a no pocos homenajes. Sobre gozar de la merecida admiraci¨®n general, cuenta Rostrop¨®vich con la adhesi¨®n y simpat¨ªa un¨¢nimes de nuestra filarmon¨ªa.Como persona, dimana de Rostropr¨®vich una entra?able afectividad, capaz de suprimir las distancias entre el mito y sus seguidores; como m¨²sico, se muestra desde el comienzo de su espectacular carrera interesado por todo y por todos, y ah¨ª est¨¢ la lista de obras nacidas por encargo o impulso del artista para demostrarlo; como instrumentista, es singular e insuperable: acepta la herencia de sus grandes predecesores, pero la acomoda con naturalidad a los imperativos del nuevo tiempo. De esta manera, el Concierto de Dvorak suena, en Rostrop¨®vich tan expresivo, tenso y po¨¦tico como en los m¨¢s altos mitos de ayer, pero despojado de ¨¦nfasis, esto es, puro en su belleza y sus significaciones.
Cuando Rostrop¨®vich canta, las melod¨ªas del compositor bohemio dictan clases de est¨¦tica. A todo ello se une otro valor: la capacidad de entrega, la responsabilidad art¨ªstica y el amor y consideraci¨®n por todas las audiencias. Rostrop¨®vich se da siempre por entero, y nos transmite ¨ªntegramente su arte ver¨ªdico. El impacto es entonces el mismo en cualquier ocasi¨®n. En Segovia se ha repetido nuevamente y con ¨¦l la reacci¨®n clamorosa que el violonchelista acalla con la habitual Zarabanda de Bach en su versi¨®n ensimismada y casi religiosa.
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