Chile investiga si la polic¨ªa de Pinochet us¨® Colonia Dignidad para torturar presos pol¨ªticos

Chile ha decidido estrechar el cerco sobre Colonia Dignidad. El juez que investiga el secuestro y abuso de menores en el interior del enclave que esta secta alemana mantiene a 320 kil¨®metros al sur de la capital chilena ha recibido ahora permiso de la Corte Suprema para a?adir al expediente la tortura y desaparici¨®n de m¨¢s de un centenar de presos pol¨ªticos bajo la dictadura militar de Augusto Pinochet. La decisi¨®n se produce d¨ªas despu¨¦s de las espeluznantes declaraciones de dos j¨®venes fugados del enclave, quienes aseguran que el l¨ªder de la colonia, el ex nazi Paul Schaeffer, pr¨®fugo de la justicia, abusa de un ni?o cada noche y sigue escondido en t¨²neles secretos de la colonia que la polic¨ªa no conoce.

El esc¨¢ndalo de Colonia Dignidad toma as¨ª un giro totalmente imprevisto. Hasta ahora, la polic¨ªa trataba de detener a Schaeffer por abusos sexuales a menores y, de forma secundaria, por evasi¨®n de impuestos, para lo que ha registrado en nueve ocasiones los inmensos terrenos dela secta (13.500 hect¨¢reas). Sin ¨¦xito.Pero el viernes, la Corte Suprema orden¨® al juez especial que desde marzo lleva el caso, Hern¨¢n Gonz¨¢lez, que investigue el paradero de 112 personas detenidas entre 1975 y 1977 bajo la dictadura del general Augusto Pinochet (1973-1990), que presuntamente desaparecieron tras ser llevadas a la colonia por la polic¨ªa pol¨ªtica del r¨¦gimen, la siniestra DINA, seg¨²n denuncias de organismos de derechos humanos.

Se trata de la primera vez que un alto magistrado (a Gonz¨¢lez se le han asignado poderes especiales) recibe la orden de investigar los desmanes de la DINA, hoy desmantelada, pero en sus tiempos eficaz brazo ejecutor de la pol¨ªtica represiva de Pinochet. En la actualidad, el ex dictador sigue manteniendo un puesto de primer orden en el sistema pol¨ªtico chileno desde su cargo de jefe de las Fuerzas Armadas.

Sobre la responsabilidad de la polic¨ªa secreta de Pinochet en la desaparici¨®n de l¨ªderes pol¨ªticos de la oposici¨®n y su extra?a alianza con la nazi Colonia Dignidad existen fuertes indicios. Un antiguo agente secreto, Samuel Fuensalida, ha declarado que la DINA envi¨® docenas de detenidos a Colonia Dignidad para ser interrogados y torturados.

Entre ellos se encontraban los dirigentes socialistas Carlos Lorca y Ezequiel Ponce. El primero era diputado y secretario general de la Juventud Socialista, y fue internado en Colonia Dignidad tras el golpe de Estado de Pinochet contra el presidente Salvador Allende en 1973 .

El diputado y presidente del Partido Socialista (PS), Camilo Esacalona, se mostr¨® ayer satisfecho de la decisi¨®n de la Corte Suprema y afirm¨® que Manuel Contreras, ex jefe de la DINA, hoy encarcelado por el asesinato en Washington del ex diplom¨¢tico Orlando Letelier, era un visitante asiduo de Colonia Dignidad. "La extrema derecha de este pa¨ªs mantuvo durante mucho tiempo v¨ªnculos con los l¨ªderes de la colonia", declar¨®.

La resoluci¨®n del tribunal fue recibida con entusiasmo por las organizaciones de derechos humanos, que la consideraron "una luz de esperanza para muchas personas". En el informe de la Comisi¨®n Verdad y Reconciliaci¨®n, que en 1991 estableci¨® lo ocurrido con los detenidos desparecidos durante la dictadura, se reconoci¨® que en la colonia, por alg¨²n tipo de acuerdo entre la DINA y los dirigentes del lugar, se habr¨ªa mantenido y torturado a presos pol¨ªticos, perdi¨¦ndose el rastro de algunos. Pero no se tom¨® ninguna medida judicial, lo que ahora viene a paliar el auto de la Corte Suprema.