La Iglesia se convierte al rock

La fe con m¨²sica entra, especialmente con m¨²sica rock. La Iglesia italiana lo ha comprendido al fin y ha puesto a la venta el primer disco compacto con grabaciones de m¨²sica rock cat¨®lica de su historia. "Pedimos perd¨®n a los j¨®venes por el retraso con el que la Iglesia se ha aproximado a esta m¨²sica". Entonando este curioso "mea culpa", los responsables de la Conferencia Episcopal italiana han puesto en el mercado un ¨¢lbum -Hope Music Festival- grabado en el Festival de San Remo, repleto de canciones cat¨®licas convenientemente aderezadas con el sonido rock, por lo que parece, todav¨ªa el sonido de la modernidad. Y no queda todo ah¨ª. Los temas del Hope Music Festival, que incluyen sonidos pop, funky, jazz y blues, ser¨¢n interpr¨¦tados en directo la tarde del pr¨®ximo d¨ªa 27 en Bolonia, poco antes del gran concierto musical que cerrar¨¢ el mismo d¨ªa -la clausura oficial ser¨¢ el domingo- en la capital de. Emilia Romana el XXIII Congreso Eucar¨ªstico italiano inaugurado este fin de semana por el primer ministro, Romano Prodi.Estrellas de la m¨²sica pop, como Bob Dylan y los italianos Adriano Celentano, Lucio Dalla y Gianni Morandi, cantar¨¢n esa tarde noche para el Papa y una cifra imprevisible de espectadores que abarrotar¨¢n un escenario bolo?¨¦s preparado a tal efecto. Eso sin contar con los cientos de miles de italianos que podr¨¢n seguir la velada a trav¨¦s de la RAI. La Iglesia cat¨®lica abre las puertas a una m¨²sica demonizada durante a?os con la pretensi¨®n de recuperar el inter¨¦s de la poblaci¨®n juvenil.

A simple vista, la mezcla parece fuerte. Eucarist¨ªa y guitarras el¨¦ctricas, ex rebeldes barbudos y legiones de obispos mano a mano bajo las estrellas y los focos de la televisi¨®n.

Tan fuerte que algunos cat¨®licos, como el escritor Vittorio Messori, se rasgan las vestiduras viendo a una vieja instituci¨®n como la Iglesia cat¨®lica asumir sin mayores complejos los valores de la sociedad medi¨¢tica, y bailar -nunca mejor dicho- al son que marca la sociedad del espect¨¢culo. "En vez de Jesucristo, la superstar aqu¨ª ser¨¢ C¨¦lentano o Bob Dylan". Y el Congreso Eucar¨ªstico corre el riesgo de ser recordado s¨®lo como la "discoteca al aire libre con el Papa como disc jockey", declaraba Messori ayer al Corriere della Sera. Las autoridades eclesi¨¢sticas, sin embargo, han encontrado ya una espl¨¦ndida justificaci¨®n ideol¨®gica para esta nueva ofensiva rockera. Domenico Sigalini, responsable de la pastoral juvenil de la Conferencia Episcopal italiana sale al paso de las cr¨ªticas. "El cristianismo no puede expresarse s¨®lo con discursos sin sentido, est¨¢ obligado a asumir al lenguaje con el que los j¨®venes expresan sus grandes esperanzas y sus ideales. No queremos hacer un rock cat¨®lico, sino un rock que exprese valores".

Nunca. hasta ahora, sin embargo, un acontecimiento de car¨¢cter teol¨®gico como un congreso eucar¨ªstico nacional, donde, se supone, la Iglesia se re¨²ne para meditar sobre uno de los tres misterios fundamentales del dogma cat¨®lico, se hab¨ªa convertido en una especie de "kerm¨¦s espiritual". Quiz¨¢ la explicaci¨®n de este nuevo intento de aggiornamento est¨¦ en el simbolismo de un congreso, el ¨²ltimo de este siglo, seg¨²n ha recordado el propio Karol Wojtyla, que constituye "una etapa privilegiada en el camino de la preparaci¨®n del Jubileo del Tercer Milenio". Los peregrinos que atiborran Bolonia -la ciudad m¨¢s roja de Italia- desde el s¨¢bado Son conscientes de participar en una especie de Olimpiada espiritual en la que la m¨²sica rock no ser¨¢, desde luego, el ¨²nico ingrediente profano. En nueve d¨ªas, el Congreso Eucar¨ªstico acoger¨¢ unos 50 acontecimientos que se prev¨¦n masivos, entre ellos tres grandes exposiciones, seis conciertos, conferencias de varios cardenales y jornadas deportivas. Los organizadores del Congreso Eucar¨ªstico pondr¨¢n a la venta medallas conmemorativas del gran encuentro. Aunque nadie ignora que la memoria colectiva registrar¨¢ sobre todo la actuaci¨®n de Dylan ante el Papa, a las puertas del Tercer Milenio.

Algo que estremece a Messori: "Espero que Wojtyla -y lo digo sin pretender darle lecciones de c¨®mo se dirige la Iglesia- se confiese enfermo y no acuda el s¨¢bado pr¨®ximo a la tan tra¨ªda vigilia con los j¨®venes y las estrellas del rock".