Los JJ OO de Barcelona inspiran la seguridad de la boda de la Infanta
La boda de la Infanta ser¨¢ tambi¨¦n una boda ol¨ªmpica en cuestiones de seguridad. Los Juegos Ol¨ªmpicos de Barcelona sirvieron para que los servicios de seguridad adoptaran avanzados sistemas t¨¦cnicos y una organizaci¨®n policial basada en operaciones ocultas a los ciudadanos. Se trataba de que Barcelona viviera los JJ OO como una fiesta, pero sin la presencia agobiante de polic¨ªas. Este mismo criterio se adoptar¨¢ el d¨ªa de la boda, que concentrar¨¢ en Barcelona a las m¨¢ximas autoridades espa?olas y un importante n¨²mero de personalidades extranjeras. La Operaci¨®n Rosa reunir¨¢ a 3.600 polic¨ªas.
La voluntaria renuncia a una presi¨®n policial en la calle no supone que todos los riesgos y todas las hip¨®tesis no hayan sido analizados minuciosamente. Desde hace meses, expertos de la Casa Real trabajan en la Delegaci¨®n del Gobierno de Barcelona con t¨¦cnicos del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa (CNP) y de la Guardia Civil en la preparaci¨®n de la operaci¨®n y la distribuici¨®n de las tareas.El CNP asumir¨¢ el 80% del trabajo y casi todos los sistemas de seguridad estar¨¢n en sus manos. A la Guardia Civil le corresponder¨¢n la vigilancia y el control del puerto y del aeropuerto, as¨ª como la escolta de personalidades en las carreteras.
La Guardia Urbana de Barcelona regular¨¢ el tr¨¢fico en la ciudad y aportar¨¢ su escuadr¨®n de caballer¨ªa, que junto con el de la Guardia Real escoltar¨¢ a los novios cuando, tras la boda, efect¨²en un recorrido de m¨¢s de tres kil¨®metros por las calles de Barcelona en un Rolls-Royce descubierto. A los Mossos d'Esquadra, la polic¨ªa auton¨®mica catalana, se les reserva la misi¨®n de controlar la plaza de Sant Jaume, pr¨®xima a la catedral, por la que acceder¨¢n a la bas¨ªlica una parte de los invitados.
Lugares especialmente controlados ser¨¢n los 19 hoteles en los que se alojar¨¢n los invitados a la boda, y muy especialmente el hotel Juan Carlos I, donde el 2 de octubre los novios celebrar¨¢n su despedida de solteros y donde se alojar¨¢n los miembros del Gobierno; el hotel Arts, en pleno Port Ol¨ªmpic, que acoger¨¢ a los miembros de las casas reales, y el hotel Meli¨¢, reservado para el cuerpo diplom¨¢tico.
Excepci¨®n hecha de las altas autoridades del Estado y extranjeras (reyes o presidentes de gobierno), la mayor parte de los invitados llegar¨¢n a la catedral -y despu¨¦s al palacio de Pedralbe- en autocar. Este es otro sistema experimentado con ¨¦xito por primera vez en los JJ OO de 1992. Con ello se concentra el riesgo, pero tambi¨¦n la seguridad, y se les puede proteger mejor. Con los desplazamientos individuales pasa lo contrario: el riesgo se dispersa, pero la seguridad tambi¨¦n.
En la Operaci¨®n Rosa -la de la boda de Sevilla fue la Operaci¨®n Perla- participar¨¢n en la operaci¨®n 3.600 agentes, 3.100 del CNP -de los que 1.200 proceden de las unidades centrales de la polic¨ªa- y 500 de la Guardia Civil.
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